Estimada Doña Alicia; estoy de acuerdo en que la clave es la educación, pero no creo que el sistema alemán sea un buen ejemplo a seguir. Despues de 4 años tan sólo de Grundschule no se puede clasificar a los niños de esa manera. No porque lo diga un pedagogo progre, sino porque a los 10 años no se han desarrollado lo suficiente; es demasiado pronto, por muchos test psicológicos que se hagan, para saber si un niño merece ir a la Formación Profesional o la Universidad. Es cierto que hay pasarelas entre unas y otras, pero a los 10 años, si te mandan a la Hauptschule lo único que entiendes es que eres tonto, y cuando acabas vas de cabeza al taller, que parece ser lo único para lo que sirves; muy poca gente sale de las Haupt- o Realschulen para hacer el Abitur, lo que en mi opinión significa que se está desperdiciando el talento de niños que quizá al acabar 4º de Primaria no dan la talla, pero que con esfuerzo y dedicación pueden aún enderezarse. En fin, como hijo de la EGB que soy, creo que 8º era un buen momento para decidirse entre FP y BUP ;)
Un saludo,
pR.-
La frese: "pero la separación, o segregación, como suelen decir los pedagogos progresistas, que se muestran horrorizados de que a los 11 años se seleccione a los alumnos en función de sus resultados académicos", me ha recordado que por algún extraño maleficio, un mal día, el mundo civilizado se vio abducido por un grupo de lunáticos que bajo el epígrafe del "progresismo" han defendido las ideas más descabelladas, contrarias al sentido común, a la lógica y a la piedra de toque de la realidad de cada día.
Esta panda de pseudo-intelectuales descerebrados, que se ha apropiado de una "verdad" que no tiene nada que ver con el mundo real y es capaz de inventar las carreras olímpicas en las que los amputados de ambas piernas pudieran correr en igualdad de condiciones que los atletas normales; insistirán en que un alfeñique pueda ser portero de discoteca o -como comprobamos el otro día- decidirán que si los ciegos no pueden leer los libros electrónicos, pues que no los lea nadie para que no exista discriminación. En este sentido, no les importa lo más mínimo que la realidad sea porfiada y nos muestre cada día que afortunadamente, los seres humanos no somos iguales. Que como diría mi abuelo, algunos tienen un oído en frente del otro, mientras otros son capaces de componer melodías desde la más tierna infancia.
Están tan empecinados en su delirio irreal que, cualquier selección de personas en función de sus capacidades les parece anatema y si de ellos dependiera, los canarios flauta competirían en igualdad de condiciones con los sabuesos en lo que se refiere a la capacidad de rastreo de presas.
Sin embargo, lo más maravilloso del caso no es que aparezca de vez e cuando algún infeliz defendiendo el motor de agua, sino que tantos se hayan dejado arrastrar por la herejía, o que el resto no haya dado hace tiempo un puñetazo en la mesa y los haya mandado directamente a hacer puñetas. Sobre todo, porque padecemos en nuestras carnes el resultado de su estupidez -si la padecieran solo ellos, les compraría gustoso la cuerda para que se ahorcaran-.
Mi única esperanza es que algún día la civilización despierte y el sentido común y la observación de la sabia naturaleza vuelvan a guiar nuestros pasos colocando a estos desquiciados aprendices de brujo en el lugar del que nunca debieron salir. Un sitio en el que todos se creen Napoleón o Josefina.
Según he estudiado en historia de la spicologia esta educación viene de principios del XIX, tras la derrota de los ejercitos alemanes contra Napoleon. Según cuenta la leyenda. fue el rey Gillermo quien reunió a los eruditos Alemanes y les hizo está pregutna : ¿Que debemos hacer como pais para no volver a sufrir la derrota? Los eruditos no se lo pensaron, su respuesta fue : "la educación"
En cuestiones de educación hay que quitarse el sombrero delante de los alemanes.
Hacia los 10 u 11 años por razones de actitud, de capacidad , de intere-
és, etc. se produce un diversificación en el progreso intelectual de cada alumno. Y es fundamental que esa diversificación se tenga en cuenta en
la planificación de los estudios. Ya hemos visto el resultado de no considerar esa diferenciación en el camino del aprendizaje.
También deberíamos aprender mucho de como funcionan las Realschule y las Berufschule. Preparan bien a los alumnos. Ninguno sale iletrado, y todos salen bien preparados profesionalmente.
Soy absolutamente pesimista respecto a cómo salir del fondón en que hemos caído: tal vez habría que comenzar por una alfabetización general , extensiva y exigente. Seguro que entrañaría cierta dificultad. ¿Pero no tenemos ya casi cinco millones de parados?
He visto la enorme (en tamaño y calidad) entrada del blog de jalepata que cita y me queda clara una cosa: a los personajillos socialistas, en los cursos de "deformación política" les enseñan dialéctica muy bien enseñada y de entre ellos, escogen a los más liantes. De tal suerte es así que personajes honrados y con la verdad de su lado con la señora Alicia Delibes o el señor Gago aparecen a su lado (y perdónenme la expresión) como unos "patanes embarullados", simplemente porque no saben defenderse contra las estrategias dialécticas preñadas de mala educación de los socialistas, cuando no del magistral uso que éstos hacen de la "corrección política". Y no saben porque no les han preparado, porque están acostumbrados a otro tipo de intercambio de ideas más respetuoso o porque no tienen dotes de polemistas (una especie de falta de agresividad esencial).
La imagen cuenta mucho para los socialistas. La miman mucho. Por eso la "imagen" de ese debate fue la "victoria" de la "portavoza", cuando debían haberla molido a palos (dialécticos, por supuesto) por mentir con tanta desfachatez. Pero mientras quienes forman el estrato visible de lo que se ha dado en llamar "la derecha" tiemble de miedo cada vez que la pesoe amenaza con llamarlos "fachas", la pesoe ganará SIEMPRE debates como ése. Porque al final, resulta que no sólo hay que tener razón, sino hacerlo visible. Y en lo segundo los socialistas son expertos reconocidos. Contra eso es contra lo que hay que luchar, además de, por supuesto, tener razón. Y sin complejos ni miedo alguno. Con esta gentuza no vale saberse el tema: hay que defenderse de su agresividad dialéctica.
Pues yo creo que la clave,al menos aqui en España es que tengamos un gobierno que haga cosas normales.No nos hacen falta ni grandes medidas ni grandes reformas en el sistema educativo ni en el resto de sectores,solo políticos normales que hagan cosas normales.
Y España por si misma sale adelante de que lo que sea.
¿Acaso Aznar fue un politico extraordinario?...pues no,dejó muchas cosas sin hacer o a medio hacer...pero bastó con que aplicara un minimo de coherencia a su política y subimos como la espuma como nunca se habia visto y en ningun pais del exterior se esperaba.
Que no le quepa la menor duda de que es por eso.
Tiene toda la razón, doña Alicia, pero como Vd. bien sabrá (porque lo sufrió en sus propias carnes), no es nada fácil convencer a nuestros compatriotas de qué es lo que hay que hacer con la Educación: cf.http://blogs.libertaddigital.com/jalepata/
No le quepa la menor duda, Señora Alicia Delibes, de que así es.
Aguador, el problema que planteas es en toda su amplitud el problema de la derecha española a la hora de dirigirse a la nación: los complejos, el no querer emplear un lenguaje ni unos valores propios por temor de que parezcan "de derechas". Estoy seguro que la señora Delibes tiene argumentos suficientes para acorralar a cualquiera de esos analfabetos del psoe; pero si nos la cogemos con papel de fumar en cuanto sacan la palabra "igualdad" es que estamos dejándonos derrotar de antemano. Hay que poner en su sitio todo este palabrerío, a la "igualdad" oponer la "libertad", a la farfolla feminista oponer el individuo; a la "solidaridad" y la "equidad" los valores de la fortaleza, la sabiduría y la hombría de bien. Seguro que todo esto agitaría el gallinero político y mediático lo indecible, pero no está claro que fuese a restar votos a la derecha y sí que despertaría las esperanzas de mucha gente amodorrada.