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Amigos de un segundo Holocausto

El terrorismo palestino despertó una extendida simpatía en Occidente, en gran medida gracias al apoyo del aparato comunista: sus exigencias se presentaban como una cuestión de justicia, y sus métodos como producto inevitable de la inmensa opresión sufrida

siona dijo el día 15 de Junio de 2010 a las 01:27:

Un gran artículo D. Pío,pero cabe recordar que los ataques que Israel lanzó sobre el Líbano fueron porque su "estado"moruno les declaró la guerra,como tambien cabe recordar que los libaneses cristianos prefirieron ponerse del lado de los terroristas en vez del de los israelíes y los que no quisieron ceder ante el islám viven,muchos de ellos,refugiados en el propio Israel donde gozan de los privilegios que en su tierra natal les negaron.

nifobo dijo el día 3 de Junio de 2010 a las 18:14:

Como siempre D. Pio, sensato, veraz, objetivo, ecuánime e impulsor de la verdad. Estupendo.

Vendeano dijo el día 3 de Junio de 2010 a las 14:05:

"(...) una revancha general que llevarían con la mayor probabilidad a un segundo Holocausto"

Ayer, Vazquez-Rial:

"(...) un regalo envenenado; porque es un país, sí, pero también es un gueto, un sitio en que tener reunidos a los judíos, nunca se sabe si para dejarlos vivir sin que molesten o para matarlos mejor"

La verdad es que Fukuyama se lució con lo del "Fin de la Historia".

HGE dijo el día 3 de Junio de 2010 a las 11:18:

...y de hecho mantener a los "palestinos" (es decir, a los árabes de Palestina, porque los palestinos, en propiedad, son los judíos) en la actual situación forma parte de la estrategia de esos regímenes despóticos árabes, que por una parte mantienen muy barato el acoso contra Israel y por otra la situación les sirve para ejercer su victimismo y continuar explotando a millones de árabes en sus respectivos países. Por cierto, desde hace 60 años el "pueblo palestino" es el que más dinero ha recibido del resto del mundo sin comparación con ningún otro pueblo en ningún otro momento de la historia. A cada palestino se le asignaba sobre el papel miles de dólares, ¡a cada uno de ellos!, precisamente para mantenerlos en la holganza y dispuestos a la yihad, una vez recibida la cuartilla de racionamiento y un hogar para la proliferación de niños-bomba. Es toda una estrategia, y desmiente lo que dicen los progres de que el terrorismo lo engendra la miseria, la pobreza. Al igual que pasa con ETA, son los que tienen las necesidades cubiertas los que se dedican a practicar el terrorismo, y no aquellos árabes que tienen que trabajar en Israel para mantener a una familia (mantenerla, básicamente, apartada de las bombas y de la siniestra influencia de los "jeques" que dirigen y jalean el terrorismo).