Enhorabuena por su artículo Dª Maite!! Los que vivimos en Cataluña lo percibimos muy bién, pero es que creemos además que fuera de nuestra comunidad también es muy fácil ver venir a estos politiquillos de poca altura. El colmo es, como dice usted misma, que algunos periodistas ( por lo visto también de muy poca altura) hagan comentarios que reflejan su desconocimiento, o que por algún motivo oscuro quieren congraciarse con, o cosas peores. Y en concreto Ansón es uno de nuestros conocidos por hacer, y cada vez más frecuentemente (¿"cosillas" de la edad?), cosas absurdas. Por favor hay que plantar cara a todos ellos sin descanso o lo pagaremos todavía mucho más caro. Soy pesimista de como acabará todo esto si no hay una reorientación inmediata de la política nacional lo que incluye desmontar las autonomías. Saludos
Ansón sueña con que su historia historia rime con la transición.
Y no le faltan razones para colocarse la medalla, pero como chochea y tal vez tenga miedo de que no se le reconozcan los méritos, tiene que desvariar autopublicitariamente para reconfortar su comprensible y aceptable vanidad.
El otro día escribió sobre los sindicatos y era de vergüenza ajena. Resulta que para Ansón, esos primitivos que se cargaron la industria española para siempre, condenándonos a ser un país de funcionarios y, todavía, y al dios sol gracias, de servicios turísticos, habían sido poco menos que los paradigmas del buen hacer, la concordia y el compromiso con nuestro futuro.
Todavía tiene cuerda, y nadie le va a discutir ni su trayectoria ni su gracejo de escribiente áulico del reino, pero a veces, como he dicho, chochea.
¿Se equivoca Ansón? (Así, a su estilo) Pues sí, pero al menos no lo hace por maldad; y sus aguas, a fin de cuentas, ya no mueven muchos molinos.
Este Ansón de la Real Academia esta chocho hace ya tiempo, desde que empezó a compadrear con Cebrián. ¡ Duran no vale ni para presidir una cominidad de vecinos !
Comprendo su enojo con la salida de pata de banco de Anson; pero, en realidad, toda la etapa de gobierno de Pujol contó con la comprensión del resto de los españoles que en Cataluña no hicieron gran cosa por cambiar, puesto que fue reelegido hasta la náusea.
Jamás he comprendido que un partido de la derecha local -CiU- haya contado con más comprensiones que un partido de la derecha nacional -PP. De hecho, CiU está trufado de restos del franquismo catalán y, sin embargo...
Lo de Anson me parece propio de un miope en materia de política catalana como él.
Espero que no le entreguen los españoles la gobernabilidad a esos fascistas disfrazados de lagarterana; pero, ya lo hicieron Aznar, Zapatero...En fin: increíble, pero, cierto.
Recordemos que Anson, en una célebre ocasión, nombró a Pujol nada menos que "español del año". Fue antes de que Pujol apoyara a González en 1993. Entonces Anson descubrió repentinamente que el idioma castellano estaba siendo perseguido en Cataluña.
Los españoles que viven fuera de Cataluña no entienden -no pueden o no quieren entender- que el idioma castellano está realmente siendo perseguido en Cataluña. Y los que viven en Cataluña se dividen en dos grupos: 1) los nacionalistas catalanes, que aplauden y celebran la persecución; y 2) los castellanohablantes, los cuales, por motivos que no acabo de entender, aceptan pasivamente su exclusión de la vida pública. Me inclino a creer que en esta pasiva, estúpida y autodesctructiva aceptación juega un gran papel la creencia -errónea- de que el "Estado Español" garantizará, en última instancia, el respecto al idioma castellano. Tal creencia no puede ser más errónea. No hay político español que no esté dispuesto a entregar a Cataluña a los nazis catetolanes. Si queremos defender el idioma castellano en Cataluña, tenemos que empezar por romper toda relación con los políticos españoles. Promover la independencia de Cataluña, para que los castellanohablantes se asuman a sí mismos como ciudadanos de pleno derecho, no como forasteros con complejo de papanatas.