Menú

El crimen purificador

Rodríguez Zapatero y los suyos han convertido a nuestro país en una sucursal, una portavocía de los regímenes totalitarios de América Latina.

ARMM70 dijo el día 28 de Febrero de 2010 a las 07:42:

El Partido Socialista es portavoz no sólo de los totalitarismos iberoamericanos,es portavoz de cualquier totalitarismo a nivel mundial.
Su propio talante es ese.Totalitarismo:yo mando, tu obedeces.
Siempre ha sido así y siempre lo será,con estos no hay nada nuevo bajo el Sol.
Quizás sea la razón por la que siendo un país grande de la UE,el peso real del país sea el de Malta o Chipre.República Bananera al fin y al cabo.

leylo dijo el día 27 de Febrero de 2010 a las 20:15:

Parece que este gobierno, por llamarle de alguna forma,está esperando que aparezca porel horizonte algún asesino para echarle una manita:
Que la lucha contra ETA estaba encarrilada, pues vamos a negociar. Que de entre los seguidores de alguna religión sólo se presentan como asesinos los de la musulmana, pues vamos con ellos a donde sea.
Que el regimen cubano es torturador y asesino (Lula dice que la culpa ha sido suya. Habria que haberle oido si hubiera muerto De Juana) pues necesita un apoyo en Europa.
Y digo yo ¿por qué?
¿Qué les deben los socialistas a cada uno de estos asesinos? Algo hay porque si no, no se explican tantas coincidencias entre unos y otros.
Dios los cría...

veintido dijo el día 27 de Febrero de 2010 a las 18:04:

Guardé en ordenador el articulo publicado en ABC publicado por Luis Maria Anson. A causa de la muerte por huelga de hambre de Orlando. esta carta aclara con toda su crudeza la política llevada por nuestro pais con respecto a la dictadura cubana.

Carta de Zapatero a Fidel Castro

LUIS MARIA ANSON

Organicé la Agencia Efe en La Habana en los 80. De aquella época conservo allí buenos amigos. Uno de ellos me ha filtrado la carta que José Luis Rodríguez Zapatero ha dirigido a Fidel Castro. La reproduzco a continuación sin quitar ni añadir una coma.

«Querido y admirado Presidente, mi Comandante:

El ministro de Asuntos Exteriores de mi Gobierno, Miguel Angel Moratinos, me da cuenta de su viaje oficial a Cuba y me informa de la evolución favorable de la salud de Vuestra Excelencia. No sabe cómo lo celebro porque mi generación se ha educado con la vista puesta en la Cuba comunista y en la figura irrepetible de Fidel Castro, centinela de la libertad, caudillo del Caribe por la gracia del destino histórico y comandantísimo de los ejércitos de Tierra, Mar y Aire de la perla de las Antillas.

Las nuevas generaciones que viven en el hedonismo, no tienen conciencia clara de lo que ha supuesto para el mundo la lucha de Vuestra Excelencia por la libertad, por los Derechos Humanos y por la política social, todo ello frente a la voracidad del Imperio, frente al incalificable bloqueo impuesto por los Estados Unidos. A pesar de esa tropelía histórica, Cuba es hoy, gracias a Vuestra Excelencia, un paraíso de libertad, una nación justa en la que se respetan y acatan las leyes derivadas de la voluntad general libremente expresada, con un pueblo libre y esperanzado que disfruta de un alto nivel de vida, habiéndose sustituido en todas vuestras ciudades el caduco signo de la cruz por el de la hoz y el martillo. El ministro Moratinos se ha quedado en un pasmo ante el progreso y la dicha de la ciudadanía cubana.

Ciertamente la depravación del turista extranjero ha obligado al Gobierno de Vuestra Excelencia a mantener en las calles a las jineteras pero la inmensa mayoría de la nueva generación vive feliz, encuadrada en ese frente de juventudes admirable que es la organización de los pioneros.

Di instrucciones a mi ministro para que no abogara por los llamados «presos políticos», que no son otra cosa que mercenarios al servicio de una potencia extranjera, traidores a la patria o terroristas que pretenden socavar los cimientos de la gloriosa Revolución, el régimen establecido por Vuestra Excelencia, que es ejemplo en todo el mundo de respeto a los derechos humanos y a las libertades. Sólo la falacia del ultraderechista Aznar pudo llevar a la decadente Europa a la posición fascista de tomar medidas contra el régimen de Vuestra Excelencia. Naturalmente yo he decidido restablecer una relación privilegiada con el Gobierno democrático de Vuestra Excelencia. También di instrucciones a mi ministro para que no atendiera a los disidentes, ridículas minorías resentidas, incapaces de comprender la grandeza de la Revolución que Vuestra Excelencia, patria o muerte, ha llevado a cabo.

Dentro de dos años, mi Comandante, se cumplirán los 50 años del acceso a la jefatura del Estado de Vuestra Excelencia. Me propongo acudir a La Habana, en compañía de todo mi Gobierno para rendir a Vuestra Excelencia el homenaje que todos los demócratas del mundo le debemos. Medio siglo, 50 años, ganando una tras otra todas las elecciones ejemplarmente democráticas que se han celebrado en vuestro país, hollado un día por aquella España de infausta memoria, colonialista, católica e inquisitorial, es acontecimiento sin precedentes.

Aprovecho esta carta, mi Comandante, para implorarle que me conceda el alto honor de permitir que España se incorpore al eje Castro-Chávez-Evo, que tiene en permanente tembladera a los Estados Unidos y a su presidente fascista, el malhadado Bush.

En espera de sus gratas noticias, le reitero, mi Comandante, mi deseo y el del pueblo español de su pronto restablecimiento y quedo como siempre a la entera disposición de Vuestra Excelencia con mi renovada admiración y mi deseo permanente de seguir recibiendo vuestras enseñanzas.

José Luis Rodríguez Zapatero.

En Madrid, y en el Palacio de la Moncloa, a 7 de abril del año 2007».

Luis María Anson es miembro de la Real Academia Española.