Solo a medias estoy de acuerdo con usted.
a) Los periodistas o los medios "creadores de opinión" a lo mejor no la crean en sentido estricto, pero si quedan un rum-rum de lo que se puede y debe hablar, y ese "corpus noticiae" (permítaseme la licencia) es lo que la inmensa mayoria conoce, de lo que habla, y de lo que no se olvida. Del 11-M no se habla habitualmente, ni de la independencia de Cataluña, ni de los desmanes del Tribunal Constitucional. De Haití, del taconazo de Guti, de los árbitros de futbol haciendo mal al BarÇa y por ende a Cataluña (¡que ya son ganas!), continuamente. Asi pues el sentido que al término "ovejuno" con que se califica a la opinión pública española tendría sería la del grupo que solo habla y le preocupan determinados temas, los que le marcan ese grupo de perioodistas y medios que se dicen formadores de opinión, además de los que afectan directamente a su bolsillo. El resto, a la opinión pública, "se la sopla" y no le preocupa absolutamente nada.
b) No todos los periodistas y medios estuvieron riéndole las gracias al dictador. Entonces había una serie de medios en los que se publicaban los temas que no le interesaban al régimen (¡para que se hable de censura franquista!). Y no todos ahora le ríen las gracias a esa clase política dudósamente presentable. Lo que sucede es que tanto antes como ahora es dificil encontrar esos medios en los que leer lo que no interesa al régimen (el de entonces o el de ahora) y si lo haces y pregonas que tu eres uno de ellos, la ignominia, el desdoro, la desconsideración y a veces algunos, hasta la agresión que recibes son grandiosas, lo cual es un desdoro para este régimen y un mérito para el franquismo. Nunca dirigente franquista alguno fué conmigo tan pertinaz en la defensa de su régimen como lo son estos de este "sociatismo" incongruente, incluto y garrulo.
Siempre es agradable leerle D. Agapito
Clara exposición de la verdad.¡Qué lástima que el pueblo borreguil no lo lea (aunque lo leyera no lo entendería) y empiece a pensar en un cambio (evidentemente NO hacia mari-ANO)
D. Agapito, los creadores de opinión aunque ud. diga que no, sí que crean opinión. Hoy, antes y siempre. Hay muy pocas personas con capacidad para pensar por sí mismas. Algunos ejemplos de lo que digo.
Engaño mediático: llamar libertad de expresión a las opiniones sobre cosas administrativas,con un pacto de silencio sobre los asuntos políticos.
Engaño de opinión: llamar opinión pública a la opinión del consenso oligárquico difundida en el público.
Engaño cultural: despreciar la alta cultura en nombre de la igualdad de valor creativo de las culturas gremiales o folclóricas.
Engaño educativo: suprimir de la enseñanza las asignaturas que ayudan al saber del mundo, en aras de saberes técnicos que no tienen aplicación laboral.
Engaño nacionalista: hacer creer que España es una pluralidad de naciones y extrañarse de que todas quieran tener su Estado propio.
Estos engaños se resumen en dos únicas verdades.
A) La reforma que dio lugar a la transición fue dictada por Estados Unidos (en La Zarzuela y La Moncloa) y por Alemania (a Felipe González), por creer que la ruptura democrática de la moral y de los hábitos de poder de la dictadura daría la preponderancia al partido comunista, como en Portugal. Suárez tiene el mérito de haber introducido, contra la voluntad de Felipe González, la legalización del PCE.
B) Todo lo sucedido en España desde finales de 1976 está dictado por el miedo de los hombres de partido a la libertad política, y por su ambición de entrar en el reparto del poder estatal, la riqueza y los honores sin honor.Subordinación internacional y continuidad en el poder de los hombres y de la inmoralidad política del franquismo. Es natural que hoy las encuestas pongan en los tres primeros
lugares del prestigio a personas tan representativas de lo que ha sido la transición como Juan Carlos, Suárez y Fraga. Allí estaban y aquí están. La causa de la corrupción está precisamente en eso.
En ese viaje se vió al poder político, unido al mediático y al económico. Ellos se lo guisan y Juan Español a pagar y a callar, porque esta es una sociedad desvertebrada y politicamente descerebrada.
El Zopenco lo sabe muy bien, por eso ha llegado hasta aquí. No descarto que vuelva las próximas elecciones. Por cierto, Mariano no se entera de nada.
Sr. Maestre, ha puesto usted el dedo en la llaga, porque cada día es más evidente que la situación actual de degradación de nuestro país es consecuencia de la acción torpe de los políticos y la interesada de los conductores de la opinión, algunos de los cuales han fraguado fortunas a base de adular al poder y obtener concesiones de emisoras, etc.
Es usted insobornable y una esperanza para los que pensamos como usted.