Tontos útiles

Reconozco que hay muchas cosas que me desconciertan en torno al informe policial que acusa al PP valenciano de haberse financiado ilegalmente, cuyos extractos han sido oportunamente filtrados a la prensa el día antes de que el Gobierno de Zapatero detallara una subida de impuestos en plena crisis económica. Para empezar, vamos a dar por probado que Orange Market recibió dinero negro de sus clientes, empresas estas que, a su vez, habían recibido contratos de la Generalitat. Para asegurar que el PP era beneficiario económico de esa operación, el informe debería demostrar que la totalidad o parte de ese dinero era posteriormente ingresado por Orange Market en las arcas del partido. Eso, o que Orange Market organizara actos al PP de un coste similar a esa cantidad pero que posteriormente no le cobrara. Si la presunta financiación ilegal del PP fue, tal y como pretende el informe de marras, de esta segunda e indirecta manera, ¿cómo es que el documento policial no señala los eventos del PP que Orange Market organizó pero que, según dicho documento, podrían no haber sido abonados por el partido? ¿Cómo es que nadie exige al PP valenciano –como sí sucediera con los trajes de Camps– las facturas por los eventos del PP que Costa asegura sí "haber pagado y bien pagado"?

También me deja perplejo que muchos de los que hacen de este asunto una pantalla que apenas deja ver la crisis económica, los falsos presupuestos, la vuelta de rosca en el aborto o la subida de impuestos, acusen a su vez a Rajoy y al PP de ser los responsables de que a estos temas no se les esté dando la suficiente relevancia. Vamos, que además de cornudos, apaleados. Todo ello me resulta tan decepcionante como descubrir que los socialistas no son los únicos que se aferran infantilmente a lo de "los chuches" de Rajoy para eclipsar un innegable éxito de convocatoria en el mitin de Dos Hermanas o la merecida crítica al Gobierno que en él hizo el no siempre criticable líder de la oposición.

Al margen del contenido del informe policial, también me resulta sorprendente que quienes han acusado, en otros asuntos, muy justificadamente a miembros de la policía de cosas como destruir vestigios que podrían esclarecer el 11-M, de haber detenido a manifestantes contra la negociación con ETA por el hecho de ser militantes del PP, de haber dado "chivatazos" a ETA, o de haber esposado como a criminales a miembros del PP posteriormente puestos en libertad por el juez, se lancen, sin embargo, ahora a promover dimisiones o destituciones en el seno del PP valenciano en base a un informe policial del que ellos mismos han reconocido no tener pruebas de su veracidad.

También en este sentido me perecen surrealistas las peticiones de dimisiones o destituciones que muchos medios de comunicación han puesto en boca de Rajoy o Cospedal, no en base a lo que estos políticos han dicho, sino a lo que estos medios de comunicación interpretan que quieren decir. Reconozco que a diferencia de ellos, yo no tengo acceso a "fuentes consultadas" del PP que se mantienen en el anonimato. Lo único que constato es que tanto el público requerimiento de Rajoy al PP valenciano para que "hagan un esfuerzo, por lo menos de cara a la opinión pública, para explicar estas cosas mejor y para que no haya ninguna duda", como la petición de Cospedal al partido para que actúe con "claridad" y "contundencia", fueron ambos acompañados de un mensaje de "plena confianza" al PP valenciano, en general, y a Camps, en particular. Naturalmente esos requerimientos pueden ser, sin embargo, plenamente compatibles con el cese o la destitución de algunos miembros del partido. Lo que digo es que también pueden ser interpretados como un llamamiento a desmontar con claridad y contundencia lo que podría ser considerado un montaje.

Yo no tengo ni idea si lo de la financiación ilegal del PP es un "montaje" o no, y desde luego no sostengo que Costa, Rambla o quien sea tengan que esperar a ser condenados por un Tribunal para ser destituidos o presentar su dimisión. Pero de ahí a sumarme a quienes ya piden el cese de quienes ni siquiera están imputados por delito alguno, y hacerlo sólo en base a un informe policial cuyas acusaciones sin pruebas, en lo que se refiere a la financiación del PP, contradicen a todas las auditorias –incluidas las del Tribunal de Cuentas– que se le han hecho a este partido, hay un abismo que yo no voy a recorrer.

Aunque sea consciente de que peor que ejercer de "tonto útil" del PSOE es ignorar que la corrupción y la debilidad humana no conocen de siglas, creo que podríamos hacer un esfuerzo para evitar esta estupidez sin tener que incurrir en la otra.