"Al parecer los hombres activan gran cantidad de recursos cognitivos para impresionar a las mujeres. Eso se debe a que el esfuerzo masculino mínimo que supone el traspaso de sus genes a la siguiente generación es pequeño. Por tanto, aunque la posibilidad de que eso suceda cada día sea escasa, el intentar seducir es una actividad siempre rentable desde el punto de vista evolutivo."
Que me aspen si he comprendido algo.
Bien Sr. Gómez. Por lo que respecta al esfuerzo del varón en la generación y mantenimiento de la especie, es preciso tener claro dos cosas; la primera, el semen es lo mas puro que produce el cuerpo, de forma que el varón da lo mejor de sí, lo mas precioso, para la generación. La segunda es que para el mantenimiento de la prole y salvaguarda de la mujer, fundamento de la familia y, por tanto, de la sociedad, entrega el hombre su vida, agotándose en el esfuerzo.
Estoy de acuerdo con Vd.Es perjudicial para el hombre, para su desarrollo, la enseñanza mixta.
[tinin] Veamos:
- "Al parecer los hombres activan gran cantidad de recursos cognitivos para impresionar a las mujeres."
Según el estudio que se cita en el artículo, los hombres ocupan gran parte de su mente en impresionar a las mujeres, prestan mucha atención a las mujeres (lo que incluye el esfuerzo de planificar cómo impresionarlas, el esfuerzo mismo de impresionarlas en plan "pavo real" y -que es a lo que iba el artículo- el esfuerzo de recapacitar sobre cómo ha ido el intento de impresionarlas).
El estudio incide en esto tercero: la prueba consiste en ver si, tras un encuentro con una mujer (no un encuentro sexual sino simplemente charlar un rato), los hombres mantienen todavía una parte de su cerebro pensando en ese encuentro, de modo que disponen de menos capacidad para pensar en otras cosas.
Con todas las dudas debidas a lo pequeño de la muestra estudiada, el estudio deduce que sí, que el hombre se pasa un buen rato "atontado" tras estar con una mujer, lo que deduce a partir del mayor índice de fallos y peor memoria que demuestran los hombres al hacer diversos tests tras estar con mujeres.
El caso es que ese esfuerzo no es recíproco: el estudio no encontró indicios de que las mujeres pierdan ninguna capacidad tras estar con un hombre, luego no se pasarían el día pensando en cómo ligar.
- "Eso se debe a que el esfuerzo masculino mínimo que supone el traspaso de sus genes a la siguiente generación es pequeño."
Para la reproducción, el hombre no emplea más que unos minutos (necesarios para el coito), lo que representa un "esfuerzo" (=recursos invertidos) pequeño.
La mujer, por su parte, para la misma transmisión genética, debe hipotecar mucho más tiempo, recursos e incomodidades: nueve meses de embarazo y bastante tiempo más de crianza que requieren una mejor alimentación, reducen la movilidad y condicionan el descanso.
- "Por tanto, aunque la posibilidad de que eso suceda cada día sea escasa, el intentar seducir es una actividad siempre rentable desde el punto de vista evolutivo."
No es probable que un hombre consiga ligar a diario y que en ese ligue pueda haber sexo (=reproducción, transmisión genética), pero aun así, dado que el esfuerzo invertido es pequeño, compensa mucho el pasarse el día pensando en cómo alcanzar ese objetivo, ya que el instinto marca que aunque sólo se consiga una vez entre muchas, compensa.
Dicho de algún modo, para que el "coste" sea similar, el hombre debería conseguir acostarse con una mujer sólo una vez cada nueve o más meses de intentar ligar (y aun así sólo se igualaría el coste en tiempo, no en nutrientes y esfuerzo).
Podríamos explicarlo de otra forma, más gráfica:
Supongamos que si un hombre se acuesta con una mujer, se obliga a hacerle a ella la cama después ese día. Probablemente eso parezca "barato" a muchos, de modo que se pasarán el día maquinando cómo llevarse a mujeres a la cama.
Del mismo modo, supongamos que si una mujer se acuesta con un hombre, se obliga a hacerle la cama después durante nueve meses (en realidad más, pero pongamos nueve). Probablemente eso parezca "caro" a muchas, de modo que no verán razón para pasarse el día maquinando cómo impresionar a nadie (de hecho, es probable que se pasen el día maquinando cómo no dejarse impresionar por ningún hombre, o por lo menos maquinando qué difíciles condiciones debe cumplir aquél a quien acepte).
Lógicamente, esto debe entenderse referido a los comportamientos instintivos masculinos y femeninos. Los comportamientos adquiridos varían mucho según épocas y sociedades, y no son objeto del estudio a que hace referencia el artículo.
Un saludo.