Hola,
Soy un asiduo lector de sus artículos, los cuales me parecen realmente interesantes.
Por haber nacido en el país vasco, me siento identificado en cierta manera con usted, ya que la situación política es parecida (quizás un poco menos radical en ciertos temas, aunque aquí tenemos el terrorismo, para "compensar").
Me refiero a que parece que mi cerebro fuese una isla respecto a la política "oficial" y tristemente extendida. Si bien es cierto que una mentalidad liberal en España (si es que eso aún existe) es de por sí algo raro, una no nacionalista en el país vasco o cataluña, es ya una especie en extinción. No sé cómo puede haber tanta gente con una venda en los ojos (a mi entender) ante tanta tropelía "legal". Supongo que el nacionalismo es como el futbol, algo para lo que tienes que sentir la pasión. En fin, va a ser que no, en mi caso.
Bueno, sinceramente necesitaba desahogarme un poco, espero no aburrirle con mi carta. No sé de dónde saca fuerzas para seguir en la brecha, denunciando lo que casi nadie denuncia (especialmente en cataluña), y sintiéndose como un bicho raro (o eso creo). Yo no soy capaz, por eso la admiro. Personalmente, y a pesar de ser joven, he tirado la toalla respecto a este país en general (España, por si hay dudas). Eso sí, no hagan lo mismo desde Libertad Digital. Son la primera y última línea de defensa, para los que nos limitamos a leer y pensar que esto está muy mal. Y eso que tengo la "suerte" de que casi la totalidad de mis amigos en el país vasco no son nacionalistas, pero resulta más dificil encontrar afinidades a nivel liberal.
En fin, de verdad, muchas gracias por su trabajo y sus artículos. Hay una multitud, por ahora en silencio, que aplaudimos su decicación.
Un saludo,
Rubén.
Al final todos a pasar por el aro, las jóvenes generaciones ya ven tan normal que se rotule y se hable en las instituciones en Catalán y se suprima el castellano aun hablándose en sus casas, y es que 30 de bombardeo constante y de mentir sobre la historia de Cataluña dan para mucho
Mientras designemos al idioma común con el nombre de castellano estaremos en perpetua replegada. Pocas cosas más eficaces para los separatistas que esta denominación que consiguieron colar en la Constitución del 78 ante el ingenuo asentimiento de la mayoría. porque ¿hay mejor forma de extrañarlo de Cataluña que con este nombre que lo coloca en el nivel de lengua regional y además foránea?
¿por qué llamamos castellano a lo que en todo el universo se conoce como español y que es el principal rasgo identificativo de esta vieja nación ante el mundo ?
Cierto que las otras lenguas son españolas pero no son ni serán el idioma español por antonomassia.