¿Por qué tienen menos credibilidad las palabras de Cospedal que las de Zapatero? ¿Qué tipo de legitimidad puede aportar Zapatero que nos conduzca a desconsiderar la crítica de Cospedal al Gobierno socialista?
Agapito Maestre
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El_Erast dijo el día 11 de Agosto de 2009 a las 17:47:
El Ángel Negro
Estamos protegidos superiormente por la Democracia. La descalificación y el descrédito que el concepto mismo de estado policial encierra elimina de facto a cualquier Gobierno. Veo pues, en la presura a negar los hechos, aunque con calma, en la misma valoración de "acusación grave" lanzada por Cospedal, aunque fuera cierta, un síntoma positivo, la presuposición de su imposibilidad hoy. Puedo estar tranquilo, no por el gobierno, sino por quien está por encima del gobierno: mi Santísima Constitución ( dígase.. "en resumen"). ¡Viva!
No estamos ni se permite un estado policial, está claro, lo que conlleva por su parte mayor dificultad para que lo haya, pero si lo hay y es cierto, es difícil que se mantenga, pues es denunciable, interesa políticamente ser denunciado, y es censurado por la oposición y se supone, que por casi toda la sociedad civil, lo que desacredita al Gobierno y hace poner en peligro su propia conservación. El equilibrio de poderes nos protege. Estamos asegurados. La ventaja que tienen las sociedades ( o suciedades) democráticas avanzadas es que mirado desde un punto de vista general y normativo, pero dando principal importancia a la intensidad real, es que el "mal" auténtico de un grado considerable no se perdura por mucho tiempo.
Pese a algún pinchacito telefónico, alguna corrupción, alguna instigación al Fiscal General del Estado, algunas negociaciones con ETA que ya no se repiten porque "no se permiten", y que no obstante se intentaron hacer creer así por la oposición más que su idea previa como "proceso de diálogo", pese a cierto peligro en las concesiones nacionalistas, crítica en su idea represora de España, pero también rescatando algunos puntos de verdad en sus afirmaciones y casos particulares, entendiendo que la informacion es contrapuesta y la verdad allí es muy otra, todo ello, con cierta idea distinta de España, menos realismo desprestigiador y más creencia en la Idea que en la triste desmotivación práctica de cada acontecimiento político visto con la óptica de la crítica, digo entonces que todas todas las actualidades censuradas se ven doblemente agrandadas y además, no sabemos si son ciertas viniendo de la oposición y el despiste de la réplica. De este modo, la idea del "estado policial" elimina su malestar político, si es que lo hay, cuando se toma conciencia del dónde político general en el que se está y cómo se ponen en marcha los procedimientos de una forma que aunque mejorable, no es primitiva. De ahí que las palabras de la señora Cospedal se recojan como advertencia y cuidado, pero no como Realidad. El problema es que la pasión, la actualidad y abundancia de datos, hará perder de vista el plano positivo más global, hará juzgar todo lo que venga como un máximo y un extremo doloroso, un mal insobornable y un nuevo fracaso absoluto. Y sobre todo, por la previa interpretación del Gobierno, quizá, también sobre todo, por la idea de España, que proviene, quizá, sobre todo, de una hermosa pasión gloriosa que actúa como pasión semi-inconsciente.. en fin, más allá del sujeto particular que sufre, está la verdad objetiva que no afirma, pero niega ser en su normalidad, deplorable. De todas formas hay un sano margen para la sospecha, al tiempo que cautela y vigilancia para con las afirmaciones apresuradas. No vivimos en un estado policial, vivimos desde un punto de vista general, en un Estado con las mayores posibilidades políticas y científicas que ha tenido la historia, por muy pesimistas-realistas que seamos.
Por otro lado, aunque lo intelectual y la sangre, lo que desafía, es la posibilidad verosímil de un estado policial, cabe pensar también que lo que está haciendo el PP es algo así como poner una cortina de humo para tapar y desviar el centro de atención de sus propios escándalos, que es lo que en resumen ha replicado la socialista Elena Valenciano. De todas formas, una vez purificada la motivación política original del "estado policial", y convertida en debate, la respuesta contra réplica, seguramente retórica, ejerce un papel neutralizador de la violencia, del pensamiento que desvela, pues acaba con él a través de un simple argumento de retorno que nos reinstala en el plano cotidiano de cosas, eliminando así la idea que pretendía decir...algo. Nos quita además la "ilusión" de vivir en un estado policial, pues todo era...una maldita estrategia del PP, pura mentira, lo cual nos devuelve a la charla cotidiana de critica política. ¿ Es o no cierto?. Al noticiario diario, nada que nos anime y estimule. Este modelo de actualidad bipolar enfrentada no se sabe el alto grado de cotidianidad que posee, elimina toda posible idea en las cosas, la corta como si fuera el programa de "Gente". La corta como si fuera una meada al lado de otra persona. ¡Pues pensar es chorro libre!
Por otro lado, yo animaría a ver con placer en el presente lo negativo, por muy denunciable que sean los hechos. Y hasta desagradables. Tienen cierta positividad las instigaciones, las persecuciones, la manipulación, la extorsión, los crímenes, las agresiones sexuales y hasta los asesinatos. Tienen su valor. Hay que rescatar la positividad de lo negativo. ¿ Quién no recogería con gusto hoy la "experiencia maquiavélica de la política?. ¿ quién no mirará con la belleza y el interés de una estela histórica el exterminio nazi, o con valor un utilitarismo sin ningún tipo de miramiento?, ¿ quién no se apropiaría de algo del viejo cinismo y no lo practicaría?, ¿ quién no vería excitante y misteriosas las perversiones sádicas ?, ¿ quién no recogería con gusto y placer algo del más salvaje capitalismo?, quién no concedería cierta honorabilidad a la mentira, al sufrimiento, a la sangre o al adulterio?. ¿ quién no diría pues, cuando menos, que está bien, son necesarias, o por lo menos, tienen su valor general y su puesto en la Naturaleza, su sentido que no vemos Hoy... en caso de ser ciertas, estas pueriles e insignificantes escuchas ilegales del Gobierno a los dirigentes populares?. Es hasta síntoma de salud del PSOE. Si el PP estuviera sano y fuerte…también lo haría.
¿Quien después de haber contemplado placenteramente el valor de lo "negativo" como Idea no necesitaría también él hacerlo en su propia vida?. El Ángel negro, ha de ser también venerado. El mal es divertido, tiene su sentido, y dan ganas de hacerlo cuando ha sido visto su sentido en la Historia-Naturaleza. Aprendamos pues, de los hijos de puta, con respeto y estilo. También tienen su puesto.
El Ángel Negro
Estamos protegidos superiormente por la Democracia. La descalificación y el descrédito que el concepto mismo de estado policial encierra elimina de facto a cualquier Gobierno. Veo pues, en la presura a negar los hechos, aunque con calma, en la misma valoración de "acusación grave" lanzada por Cospedal, aunque fuera cierta, un síntoma positivo, la presuposición de su imposibilidad hoy. Puedo estar tranquilo, no por el gobierno, sino por quien está por encima del gobierno: mi Santísima Constitución ( dígase.. "en resumen"). ¡Viva!
No estamos ni se permite un estado policial, está claro, lo que conlleva por su parte mayor dificultad para que lo haya, pero si lo hay y es cierto, es difícil que se mantenga, pues es denunciable, interesa políticamente ser denunciado, y es censurado por la oposición y se supone, que por casi toda la sociedad civil, lo que desacredita al Gobierno y hace poner en peligro su propia conservación. El equilibrio de poderes nos protege. Estamos asegurados. La ventaja que tienen las sociedades ( o suciedades) democráticas avanzadas es que mirado desde un punto de vista general y normativo, pero dando principal importancia a la intensidad real, es que el "mal" auténtico de un grado considerable no se perdura por mucho tiempo.
Pese a algún pinchacito telefónico, alguna corrupción, alguna instigación al Fiscal General del Estado, algunas negociaciones con ETA que ya no se repiten porque "no se permiten", y que no obstante se intentaron hacer creer así por la oposición más que su idea previa como "proceso de diálogo", pese a cierto peligro en las concesiones nacionalistas, crítica en su idea represora de España, pero también rescatando algunos puntos de verdad en sus afirmaciones y casos particulares, entendiendo que la informacion es contrapuesta y la verdad allí es muy otra, todo ello, con cierta idea distinta de España, menos realismo desprestigiador y más creencia en la Idea que en la triste desmotivación práctica de cada acontecimiento político visto con la óptica de la crítica, digo entonces que todas todas las actualidades censuradas se ven doblemente agrandadas y además, no sabemos si son ciertas viniendo de la oposición y el despiste de la réplica. De este modo, la idea del "estado policial" elimina su malestar político, si es que lo hay, cuando se toma conciencia del dónde político general en el que se está y cómo se ponen en marcha los procedimientos de una forma que aunque mejorable, no es primitiva. De ahí que las palabras de la señora Cospedal se recojan como advertencia y cuidado, pero no como Realidad. El problema es que la pasión, la actualidad y abundancia de datos, hará perder de vista el plano positivo más global, hará juzgar todo lo que venga como un máximo y un extremo doloroso, un mal insobornable y un nuevo fracaso absoluto. Y sobre todo, por la previa interpretación del Gobierno, quizá, también sobre todo, por la idea de España, que proviene, quizá, sobre todo, de una hermosa pasión gloriosa que actúa como pasión semi-inconsciente.. en fin, más allá del sujeto particular que sufre, está la verdad objetiva que no afirma, pero niega ser en su normalidad, deplorable. De todas formas hay un sano margen para la sospecha, al tiempo que cautela y vigilancia para con las afirmaciones apresuradas. No vivimos en un estado policial, vivimos desde un punto de vista general, en un Estado con las mayores posibilidades políticas y científicas que ha tenido la historia, por muy pesimistas-realistas que seamos.
Por otro lado, aunque lo intelectual y la sangre, lo que desafía, es la posibilidad verosímil de un estado policial, cabe pensar también que lo que está haciendo el PP es algo así como poner una cortina de humo para tapar y desviar el centro de atención de sus propios escándalos, que es lo que en resumen ha replicado la socialista Elena Valenciano. De todas formas, una vez purificada la motivación política original del "estado policial", y convertida en debate, la respuesta contra réplica, seguramente retórica, ejerce un papel neutralizador de la violencia, del pensamiento que desvela, pues acaba con él a través de un simple argumento de retorno que nos reinstala en el plano cotidiano de cosas, eliminando así la idea que pretendía decir...algo. Nos quita además la "ilusión" de vivir en un estado policial, pues todo era...una maldita estrategia del PP, pura mentira, lo cual nos devuelve a la charla cotidiana de critica política. ¿ Es o no cierto?. Al noticiario diario, nada que nos anime y estimule. Este modelo de actualidad bipolar enfrentada no se sabe el alto grado de cotidianidad que posee, elimina toda posible idea en las cosas, la corta como si fuera el programa de "Gente". La corta como si fuera una meada al lado de otra persona. ¡Pues pensar es chorro libre!
Por otro lado, yo animaría a ver con placer en el presente lo negativo, por muy denunciable que sean los hechos. Y hasta desagradables. Tienen cierta positividad las instigaciones, las persecuciones, la manipulación, la extorsión, los crímenes, las agresiones sexuales y hasta los asesinatos. Tienen su valor. Hay que rescatar la positividad de lo negativo. ¿ Quién no recogería con gusto hoy la "experiencia maquiavélica de la política?. ¿ quién no mirará con la belleza y el interés de una estela histórica el exterminio nazi, o con valor un utilitarismo sin ningún tipo de miramiento?, ¿ quién no se apropiaría de algo del viejo cinismo y no lo practicaría?, ¿ quién no vería excitante y misteriosas las perversiones sádicas ?, ¿ quién no recogería con gusto y placer algo del más salvaje capitalismo?, quién no concedería cierta honorabilidad a la mentira, al sufrimiento, a la sangre o al adulterio?. ¿ quién no diría pues, cuando menos, que está bien, son necesarias, o por lo menos, tienen su valor general y su puesto en la Naturaleza, su sentido que no vemos Hoy... en caso de ser ciertas, estas pueriles e insignificantes escuchas ilegales del Gobierno a los dirigentes populares?. Es hasta síntoma de salud del PSOE. Si el PP estuviera sano y fuerte…también lo haría.
¿Quien después de haber contemplado placenteramente el valor de lo "negativo" como Idea no necesitaría también él hacerlo en su propia vida?. El Ángel negro, ha de ser también venerado. El mal es divertido, tiene su sentido, y dan ganas de hacerlo cuando ha sido visto su sentido en la Historia-Naturaleza. Aprendamos pues, de los hijos de puta, con respeto y estilo. También tienen su puesto.