En cuanto al problema del tabaco, lo único que está acreditado es la SUPINA INTOLERANCIA de los no fumadores, porque estudios científicos serios que atribuyan causas de muerte o agravamiento de una dolencia preexistente en un no fumador NO EXISTEN EN LUGAR ALGUNO DEL MUNDO.
Y si un empresario quiere tener su establecimiento abierto, y permitir que en él se fume, el Estado no es quién para obligarle a prohibir que se fume. Lo único -y aún es dudoso, en defensa de la libertad individual- que podría hacer es obligar, como actualmente se hace, a anunciarlo de forma visible enel exterior, para que ningún intransigente no fumador pueda reclamarle después daños y perjuicios.
¿Quién ha visto al Presidente del Gobierno salir a la puerta del palacio de la Moncloa a fumarse el pitillo de media mañana, como vemos a los parias de los funcionarios y trabajadores de "estepaís"?
¡Pues eso, carajo!
Es que la máxima aspiración de la izquierda española, que no ha abandonado aún el s-XIX, no lo olvidemos, es la implantación de la "dictadura del proletariado". de ahí la admiración por los Castro, Chávez y Ahmadineyad, por ejmplo. Y las dictaduras de ese tipo, ya sabemos lo que tienen, el control total sobre el individuo. Y sobre el Estado. todo a cargo del Partido.
De paso, se evitan comentar que mientras en Alemania, por la crisis económica el paro ha aumentado aproximadamente un uno por ciento, en España se ha duplicado.
¡Cuánto cuidado para que los fumadores no se mueran, y qué poca vergüenza para asesinar inocentes fetos en el vientre de sus madres! ¡O para sedar totalmente a ancianos!
¡Cuánta hipocresía y qué poca vergüenza!
Izquierda pura y dura. De la peor.
El PP debió acometer cuando pudo la guerra contra el tabaco.
Ahora ha dejado en manos de los socialistas la protección de los no-fumadores.
Los fumadores no es que sean unos menores de edad, han demostrado ampliamente que son gente sucia y sin ningún sentido de urbanidad. Prueba de ello es la ingente cantidad de colillas que emerge de la arena de nuestras playas, las colillas en aceras y fuera de ellas.
Cualquier ciudadano normal entiende que no se tiran papeles al suelo, sino que te los guardas y o los tiras en la basura de tu casa, o en el contenedor más próximo o en la papelera más cercana.
Los fumadores son incapaces de entender que no pueden tirar las colillas al suelo. Décadas de tolerancia con los fumadores se han de acabar, por la salud de los no-fumadores, por el aire que respiramos.
Palo a los fumadores, palo a los que permiten que se fume en presencia de niños.
Por la prohibición total de fumar en espacios públicos y en la calle. Fuera ceniceros en la entrada de los edificios. A fumar a casa.
Sustituyendo la seguridad social... vaya vaya, que ganas de acabar con una de las mejores sanidades del mundo. Lástima para el escritor que esté tan bien considerada por los ciudadanos. Pero vaya, no desespere, que quizás llegue algún/a fachilla al poder dentro de poco.
Eso de que quien quiera, puede elegir locales en los que se pueda fumar o no, no lo he visto yo en casi ningún sitio. A los socialiastas no le trago para nada, pero la única cosa que les agradezco es que nos hayan librado del humo de los fumadores.
Dejando aparte cuestiones sanitarias, aunque fuese inocuo, el humo del tabaco MOLESTA e INCOMODA. De la misma manera que puede hacerlo alguien que a tu lado lleve medio litro de perfume o ponga la radio a todo volumen. No es que los no fumadores tengamos una sensibilidad exquisita, es que algunos adictos al humo no tienen ninguna consideración con el prójimo.
El editorialista seguro que ha escrito artículos mejores; no deberían mezclarse churras con merinas en este tema. Si califica de "ataque a la propiedad privada" prohibir fumar en locales de restauración y ocio...¿Qué fue, por ejemplo, la expropiación de Rumasa?