Hombre, don Agapito. A lo mejor no le he entendido bien, pero ninguna libertad puede ser defendida (aunque de boquilla se proclame uno "defensor de la libertad") si se acepta siempre la mayoría como método de decisión (y más cuando uno es consciente de que las decisiones de la mayoría son erróneas). Más bien al contrario: Se está dando pie a instaurar una dictadura.
Es la verdad la que nos lleva a la libertad, y no al contrario. Por eso, la verdad (y no la decisión de la mayoría) es la que debe ser aceptada por un auténtico defensor de la libertad. Aceptar la mayoría como ámbito de decisión es propio de cobardes y comodones, no de hombres libres.
Ya lo leí en esta página hace años: democracia significa votos, no libertad.