LD (M. Llamas) El presente ejercicio finalizará con menos de 20 millones de ocupados, más de tres millones de parados registrados y una tasa de desempleo superior al 13%. Éste es el balance que arroja el inicio de la recesión económica en España en 2008, según el boletín Avance del Mercado Laboral AFI/AGETT correspondiente al mes de noviembre, elaborado por Analistas Financieros Internacionales (AFI) y la Asociación de Grandes Empresas de Trabajo Temporal (AGETT).
El paro seguirá aumentando en el mes de diciembre, "aunque en términos absolutos será inferior que en meses precedentes debido a las condiciones estacionales" (campaña navideña). "Ya hay 900.000 parados más que hace un año y el aumento del desempleo seguirá afectando más a los que tienen ahora un empleo que a los nuevos que se incorporan al mercado laboral", según el informe.
El paro registrado por los Servicios Públicos de Empleo es "hoy casi un 50% superior al que se observaba hace un año. Un ritmo de deterioro inédito en las series en las últimas décadas", reitera.
La afiliación se hunde
Pero más allá del aumento del paro, el dato más preocupante reside en la destrucción neta de empleo. En noviembre de 2007, la economía nacional creaba 480.000 empleos al año en términos de afiliación. Sin embargo, en noviembre de 2008, se han destruido 671.000. El número de afiliados a la Seguridad Social en el mes de noviembre se aproxima así a los 18,6 millones, "el nivel más bajo desde mayo de 2006".
Además, "la desconfianza de los hogares y empresas así como las malas condiciones crediticias están haciendo mella en el sector servicios, especialmente en las ramas de actividad comercial, hostelería, actividades inmobiliarias y servicios empresariales", explica el boletín.
Así, "de los 197.087 afiliados menos en noviembre respecto a octubre, los servicios son responsables de 94.500, es decir, del 48%". De este modo, "los servicios desbancan a la construcción en la destrucción de empleo neto, con 94.500 afiliados menos".
Descienden los indefinidos
Por otra parte, "los asalariados indefinidos descienden de manera intertrimestral (-100 mil) por primera vez en 14 años, exceptuando el segundo trimestre de 2006 cuando se redujo en 22.000", añade.
Por CCAA, la destrucción de empleo indefinido se concentra en la Comunidad Valenciana (-44,4%) y Cataluña (-42,3%), siendo esta última la que más empleo indefinido aporta a la media nacional (19,3%). Por el contrario, las regiones de la cornisa cantábrica, Aragón y Castilla-La Mancha, han tenido una aportación positiva.
Ante tal situación, los próximos meses no mostrarán ninguna mejoría en este ámbito. Más bien todo lo contrario. El estudio señala que "el deterioro experimentado por la afiliación a la Seguridad Social en el mes de noviembre incide decisivamente sobre las previsiones de evolución del empleo que estimamos en noviembre".
En concreto, el indicador estima una caída de la ocupación muy intensa hasta los 19,5 millones de ocupados a principios de 2009. "Las tasas de destrucción de empleo (equivalente EPA) serán del 4,1% y del 4,7% para los meses de enero y febrero de 2009, respectivamente", afirma.
Las perspectivas futuras agravarán, pues, la difícil situación económica que vive ya un creciente número de familias españolas. En la actualidad, los hogares con todos sus miembros parados ya suponen el 5% del total (hace un año suponían el 3,1%).
"Esto se corresponde con 637.711 hogares con todos sus miembros parados. Aquellos con más de la mitad de sus miembros en paro representan el 13,6% (hace un año suponían el 9,7%), es decir, 1.721.311 hogares. Ambos son los niveles más elevados desde que existe la serie (primer trimestre de 2005)", aclara el boletín.
En este sentido, "Cantabria y País Vasco son la únicas CCAA en las que no aumenta el número de hogares con todos o la mitad de los miembros en paro. Donde más aumenta es en Andalucía y Canarias, siendo estas regiones, además, donde los hogares en dicha situación superan el 20% (en el 9,3% y 8,9% de los casos, respectivamente, todos están parados).
También destacan Extremadura, Murcia y Comunidad Valenciana, en donde el 6,9%, 6,7% y 4,7% de los hogares, respectivamente, tienen a todos sus miembros en paro", concluye.
A este respecto, el presidente de Afi, Emilio Ontiveros, señala que “nos debería preocupar, y mucho, la calidad de los materiales con los que están hechos los cimientos de nuestra economía. Las medidas que se han adoptado hasta ahora acabarán mostrando algún efecto sobre el mercado de trabajo, pero habrá que intensificarlas de cara al ejercicio que viene, pues, como se ha comentado, el arranque no será bueno".
Además, "tampoco deberían descartarse reformas ambiciosas del mercado de trabajo que vayan desde la homogenización contractual hasta la extensión de la intermediación plena a las agencias de empleo especializadas”, advierte.