
(Libertad Digital) Este ciudadano ha denunciado al Ayuntamiento de Barcelona por no rotular en castellano una señal por la que fue sancionado con una multa de 90 euros. De hecho, el afectado asegura que el Código de Circulación deja muy claro que en las comunidades autónomas con más de una lengua, la señalización debe estar en ambas. "Si la señal no es legal, las multas no pueden ser válidas", ha sentenciado.
En este sentido, esta persona había enviado dos recursos al consistorio barcelonés y ante las exigencias de las autoridades civiles a que pagase la infracción decidió denunciar al Ayuntamiento ante el Juzgado contencioso-administrativo. La sanción se produjo cuando este individuo aparcó en una zona de residentes que estaba anunciada por una señal únicamente escrita en catalán.