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Yo amo a mis dos mamás

 Educación para la Ciudadanía ha entrado en barrena, quizá irreparablemente. Una sentencia judicial ha abierto la espita a una cadena de reconocimientos a la libertad de conciencia de las familias y a una tromba de objeciones. Madrid, Castilla-La Mancha y, ahora, Murcia, han anunciado que no se evaluará a los alumnos de familias objetoras. Libertad Digital rescata las ilustraciones de los manuales de EpC que mejor expresan la filosofía doctrinaria de una asignatura que, tal vez, tenga los días contados como materia obligatoria, gracias al empuje del movimiento cívico de padres por la libertad de educación.

 Educación para la Ciudadanía ha entrado en barrena, quizá irreparablemente. Una sentencia judicial ha abierto la espita a una cadena de reconocimientos a la libertad de conciencia de las familias y a una tromba de objeciones. Madrid, Castilla-La Mancha y, ahora, Murcia, han anunciado que no se evaluará a los alumnos de familias objetoras. Libertad Digital rescata las ilustraciones de los manuales de EpC que mejor expresan la filosofía doctrinaria de una asignatura que, tal vez, tenga los días contados como materia obligatoria, gracias al empuje del movimiento cívico de padres por la libertad de educación.
LD (V. Gago / Ilustración: Mienmano) La imaginería de ese túnel de lavado cerebral que es Educación para la Ciudadanía depara algunas composiciones que valen por todo un tratado.
 
Los guionistas del adoctrinamiento no se andan con sutilezas. En algunos manuales escolares –Serbal, Praxis, Santillana,...–, las viñetas funcionan como un chillón y eficaz rotulador fosforescente, remachando el catecismo con el mazo de unas imágenes parvularias de sonrojante simplicidad incluso para alumnos con dificultades de aprendizaje como los que el Informe PISA ha encontrado amontonados en las escuelas de la LOE.
 
Al menos, las imágenes de la propaganda nazi tenían a una artesana clásica como Leni Refenstahl. El triunfo de la voluntad es escalofriante como discurso político, pero al menos resulta impecable como arte cinematográfico. Las ilustraciones de los libros de texto de EpC ponen los pelos de punta como una cosa y la otra. Rudas en el adoctrinamiento y toscas en la imaginación, parecen creadas para estimular la obediencia de una generación de koalas, antes que para transmitir conocimientos a chicos de 12 a 17 años.
 
En Libertad Digital, en el programa de Gabriel Albiac para Libertad Digital Televisión, y en el blog de Álvaro Vermoet y Mienmano sobre Educación para la Ciudadanía, muchas de estas imágenes entresacadas de los libros de texto vienen ilustrando las alertas de información y análisis –Victoria Llopis, José Luis Bazán, ...– que esta modesta casa periodística emite desde hace más de un año sobre la filosofía y los propósitos de la nueva asignatura.
 
Valga la siguiente antología, para recordar de qué hablan el Gobierno y Gregorio Peces-Barba cuando hablan de Educación para la Ciudadanía:
 

¿Ellas se aman o es que él tiene un harén?

Manual de Educación para la Ciudadanía de Editorial Praxis (Reproducido por La Gaceta de Los negocios)

 

La ideología de género explicada en la pizarra

Ediciones Serbal

 

Los ciudadanos de la República Cívica de Zapatero se clasifican en dos tipos: botelloneros y meritorios, listos y pringados.

Manual de Santillana

 

Economía de medios: clero, capitalismo y perversión de menores, todo en la misma viñeta. Obsérvese el detalle de la mano de Sor Libre Competencia en el brazo del angelito

Ediciones Serbal

 

De cháchara en el rastrillo ideológico del siglo XXI. Obsérvese la mercancía del personaje de la derecha: unos slips ¿usados?, un rodillo y una petaca.

Ediciones Serbal

 

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