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EEUU y Reino Unido se concentran en la frontera entre Irak e Irán para impedir el tráfico de armas

Unos 350 soldados del Reino Unido se han sumado a las tropas estadounidenses que vigilan la zona fronteriza entre Irán e Irak. En su última edición, el periódico The Independent explica que el movimiento de militares obedece a una petición expresa de EEUU para cortar el tráfico de armas.

Unos 350 soldados del Reino Unido se han sumado a las tropas estadounidenses que vigilan la zona fronteriza entre Irán e Irak. En su última edición, el periódico The Independent explica que el movimiento de militares obedece a una petición expresa de EEUU para cortar el tráfico de armas.
LD (EFE) El periódico británico The Independent informa en su última edición que parte de las tropas del Reino Unido destacadas en Basora, la segunda ciudad más importante de Irak, han sido enviadas a la región iraquí fronteriza con Irán a solicitud del mando militar estadounidense que acusa al régimen de Teherán de injerencia directa en el conflicto iraquí.
 
De acuerdo con fuentes estadounidenses, agentes iraníes han intensificado en los últimos meses el suministro de armas a grupos terroristas chiíes que constantemente lanzan atentados contra las tropas aliadas. James Bashall, general de brigada y comandante de la primera brigada mecanizada con base en Basora, declaró al periódico: "Nos han pedido que ayudemos a poner freno al paso de armas por la frontera iraní y estoy dispuesto a ello". Explicó que "sabemos por dónde entran esas armas y estoy seguro de que podremos hacer lo necesario. Las fuerzas de EEUU están empeñadas en operaciones de pacificación, y lo que ocurre en la frontera es de especial importancia para ellos".
 
En la misión británica participarán los "Kings Royal Hussars", a 250 de cuyos integrantes se les dijo el fin de semana, sin embargo, que volverían pronto al Reino Unido como parte de la gradual retirada de las fuerzas de este país en Irak. De hecho, ese despliegue se produce sólo una semana después de que las fuerzas británicas abandonaran el palacio de Basora y se replegasen en el aeropuerto próximo a esa ciudad situada al sur de Bagdad.
 
Según The Independent, esa operación en las proximidades de la frontera iraní entraña graves riesgos ya que podría llevar a enfrentamientos con las organizaciones terroristas chiíes apoyadas por Irán e incluso con fuerzas iraníes. Puede además, dice, dar lugar a represalias en forma de ataques contra las fuerzas británicas en la base aérea de Basora y fomentar la violencia en esa ciudad, lo que obligaría a los británicos a volver a destacar allí a parte de sus tropas.
 
Para el diario, la decisión de volver a patrullar la frontera está fuertemente influida por las últimas diferencias públicas entre Reino Unido y EEUU sobre la retirada militar británica. Los jefes militares británicos sienten que no pueden desatender la última solicitud de ayuda de sus colegas estadounidenses después de haberse negado a retrasar la retirada de sus tropas del palacio de Basora, criticada como prematura por los mandos militares estadounidenses.

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