LD (EFE) Según los últimos datos del Banco de España, las deudas contraídas por los españoles y destinadas a financiar la compra de una vivienda se colocaron al cierre del noveno mes del año en 447.953 millones de euros, uno récord más en la serie de marcas históricas que vienen registrando estos préstamos desde hace años.
Ese volumen representa un incremento de 7.000 millones respecto a agosto y de unos 88.000 millones en comparación con septiembre de 2004. Con ese avance, la deuda hipotecaria supone casi el 73 por ciento de los créditos contraídos por los hogares, que ascendían a 616.700 millones el pasado septiembre.
Ante el importante ritmo de crecimiento de los créditos para la compra de vivienda –que no ha bajado del 24 por ciento en 2005–, no es de extrañar que el peso de la deuda hipotecaria sobre el total de deudas de las familias se haya incrementado considerablemente en los últimos años. Por ejemplo, los créditos hipotecarios suponían en septiembre de 2004 el 70 por ciento del total de préstamos concedidos a los hogares, mientras que ese peso descendía al 68 por ciento un año antes.
Estos datos demuestran que los hogares españoles se están endeudando cada vez más rápido, debido, sobre todo, a los altos precios de los inmuebles. De hecho, según el Gobierno, el precio de la vivienda libre se encareció el 13,4 por ciento entre septiembre de 2004 y el mismo mes de 2005, una cifra que, a pesar de representar la menor subida desde el primer trimestre de 2002, sigue manteniéndose en los dos dígitos. El incremento del valor de la vivienda en los últimos años ha sido la principal causa de que los créditos hipotecarios destinados exclusivamente a la compra de una vivienda se hayan duplicado desde 2001, según los datos del Banco de España.
Ese volumen representa un incremento de 7.000 millones respecto a agosto y de unos 88.000 millones en comparación con septiembre de 2004. Con ese avance, la deuda hipotecaria supone casi el 73 por ciento de los créditos contraídos por los hogares, que ascendían a 616.700 millones el pasado septiembre.
Ante el importante ritmo de crecimiento de los créditos para la compra de vivienda –que no ha bajado del 24 por ciento en 2005–, no es de extrañar que el peso de la deuda hipotecaria sobre el total de deudas de las familias se haya incrementado considerablemente en los últimos años. Por ejemplo, los créditos hipotecarios suponían en septiembre de 2004 el 70 por ciento del total de préstamos concedidos a los hogares, mientras que ese peso descendía al 68 por ciento un año antes.
Estos datos demuestran que los hogares españoles se están endeudando cada vez más rápido, debido, sobre todo, a los altos precios de los inmuebles. De hecho, según el Gobierno, el precio de la vivienda libre se encareció el 13,4 por ciento entre septiembre de 2004 y el mismo mes de 2005, una cifra que, a pesar de representar la menor subida desde el primer trimestre de 2002, sigue manteniéndose en los dos dígitos. El incremento del valor de la vivienda en los últimos años ha sido la principal causa de que los créditos hipotecarios destinados exclusivamente a la compra de una vivienda se hayan duplicado desde 2001, según los datos del Banco de España.