(Libertad Digital) Los resultados del conocido como "barómetro" del CIS se suelen difundir, como muy tarde, en la última semana del mes siguiente al que se ha empleado para realizar el trabajo de campo, es decir, la recopilación de datos y consultas a los ciudadanos. La importancia de este estudio es evidente: en él se reflejan, por orden de importancia, los problemas que más importan a los ciudadanos, la valoración de la situación política y económica y la nota a los políticos del Gobierno y de la oposición.
El hecho de que este año los datos –de marzo– no hayan llegado antes del Debate sobre el Estado de la Nación –en mayo– ha sido interpretado por el PP como un claro ejemplo de "manipulación y ocultamiento". En declaraciones a Libertad Digital, el diputado del PP Jorge Fernández Díaz –ex director del CIS– ha denunciado que se trata de una maniobra para "hurtar a los diputados y a los ciudadanos" de la opinión sobre el Gobierno justo antes del primer gran debate político de José Luis Rodríguez Zapatero como presidente. "Ha tenido todo el mes de abril y parte del de mayo para presentar los datos –denuncia Fernández– y no lo ha hecho, es muy grave".
Insistió en que el barómetro del CIS es un instrumento muy útil antes de un Debate sobre el Estado de la Nación porque ofrece cuáles son las preocupaciones del ciudadano. Sin embargo, la demora de dos meses, en opinión del PP, sólo puede deberse a que había "datos desfavorables" para el Gobierno.