L D (Agencias) En declaraciones a la cadena Ser, el presidente de Extremadura matiza sus declaraciones en el diario El País y rechaza el pacto con el PP porque cree que “sería darle excesivo protagonismo a Ibarretxe”. Ibarra cree que la unidad de España está garantizada y que a hay que dar “naturalidad” a la situación creada por el lehendakari. Sin embargo, respecto al debate en el Congreso, Ibarra no considera necesario que se debata el fondo, "eso sería una segunda parte", y aboga por discutir en primer lugar las reglas, y como el proyecto de reforma de Estatuto "se salta las reglas a la torera", debería ser devuelto al Parlamento vasco.
Para Ibarra, el Gobierno y también el PP deben "hacer saber al lehendakari que la pretensión del cambio de relaciones al que juega, como todo juego, tiene las ventajas de lo que se puede ganar y el riesgo de lo que se puede perder". Entre las consecuencias que tendría seguir adelante con la apuesta del lehendakari, Ibarra señala que Álava "tomaría el camino de su propia autonomía elaborando su propio Estatuto de Autonomía", con el apoyo del PSOE y el PP.
Además, según el presidente extremeño, el Gobierno de España retiraría la competencia en materia de policía autónoma al Gobierno vasco en el supuesto de que éste decidiera acometer en solitario e ilegalmente un referéndum. Por su parte, Navarra "iniciaría los trámites previstos en su Estatuto que condujeran al pronunciamiento definitivo de la población" de esta comunidad "en contra de una eventual incorporación" al proyecto diseñado en el plan.
Tras subrayar el apoyo del PSOE a las reformas estatutarias, Ibarra matiza que este partido no debe votar "en ninguna instancia, ninguna reforma que no incluya en su articulado el reconocimiento y acatamiento de que la soberanía nacional es indivisible y reside en el conjunto de los ciudadanos españoles".