L D (EFE) El Departamento de Trabajo corrigió asimismo sus cifras para los dos meses anteriores. Según las cifras ajustadas, en mayo hubo 208.000 nuevos empleos y no 235.000 como se había informado inicialmente, y en junio el aumento fue de 78.000 empleos, en lugar de los 112.000 anunciados. Los ajustes de cifras contrastan con la afirmación del presidente George W. Bush de que se han creado 1,3 millones de puestos de trabajo entre enero y junio, un dato que él ha usado con profusión en su campaña electoral.
La mayoría de los analistas esperaba que el índice de desempleo se mantuviera en el 5,6 por ciento, cifra que se mantuvo entre mayo y junio. La escasa creación de nuevos puestos de trabajo y la desaceleración del ritmo de crecimiento del Producto Interior Bruto durante el segundo trimestre despiertan dudas acerca de qué hará la Reserva Federal (banco central) en su reunión del próximo martes para estudiar su política monetaria.
La mayoría de los expertos espera que la Reserva promueva otra leve subida de las tasas de interés del 1,25 al 1,5 por ciento, como precaución para atenuar el ritmo de inflación en lo que se percibía hace un mes como un firme crecimiento de la economía. Pero en momentos en que el gasto de los consumidores ha reducido su ritmo de crecimiento y el mercado laboral muestra indicios de debilidad, otro incremento de las tasas de interés no contribuiría ni a la reactivación económica ni a las perspectivas de Bush para la elección del 2 de noviembre.
La mayoría de los analistas esperaba que el índice de desempleo se mantuviera en el 5,6 por ciento, cifra que se mantuvo entre mayo y junio. La escasa creación de nuevos puestos de trabajo y la desaceleración del ritmo de crecimiento del Producto Interior Bruto durante el segundo trimestre despiertan dudas acerca de qué hará la Reserva Federal (banco central) en su reunión del próximo martes para estudiar su política monetaria.
La mayoría de los expertos espera que la Reserva promueva otra leve subida de las tasas de interés del 1,25 al 1,5 por ciento, como precaución para atenuar el ritmo de inflación en lo que se percibía hace un mes como un firme crecimiento de la economía. Pero en momentos en que el gasto de los consumidores ha reducido su ritmo de crecimiento y el mercado laboral muestra indicios de debilidad, otro incremento de las tasas de interés no contribuiría ni a la reactivación económica ni a las perspectivas de Bush para la elección del 2 de noviembre.