L D (Agencias) El delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández, dice que las características de la bomba colocada por ETA en una subestación eléctrica de Añón de Moncayo (Zaragoza) y la orografía y accesibilidad del lugar hacen pensar que no se requirió experiencia ni un conocimiento especial de la zona para perpetrar el atentado.
En una comparecencia ante los medios para dar a conocer algunos detalles relacionados con la explosión, esta mañana, de un artefacto de "escasa entidad" en esta subestación eléctrica en desuso, Fernández explicó que el edificio junto al que explotó la bomba está ubicado en la falda del Moncayo, pero es "muy visible", es decir, "no está oculto y una pequeña carreterita asfaltada pasa por la puerta".
El delegado condenó "de la manera más enérgica y clara" este tipo de acciones e instó a "evitar especulaciones", porque lo que hacen las bandas terroristas es "aterrorizar" y "unas veces lo hacen asesinando y otras simplemente causando daños materiales".
En una comparecencia ante los medios para dar a conocer algunos detalles relacionados con la explosión, esta mañana, de un artefacto de "escasa entidad" en esta subestación eléctrica en desuso, Fernández explicó que el edificio junto al que explotó la bomba está ubicado en la falda del Moncayo, pero es "muy visible", es decir, "no está oculto y una pequeña carreterita asfaltada pasa por la puerta".
El delegado condenó "de la manera más enérgica y clara" este tipo de acciones e instó a "evitar especulaciones", porque lo que hacen las bandas terroristas es "aterrorizar" y "unas veces lo hacen asesinando y otras simplemente causando daños materiales".
Preguntado por la reacción del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de visita hoy en Zaragoza, Javier Fernández indicó que el jefe del Ejecutivo, ante este tipo de acciones, "siempre se lamenta de que haya personas con estas intenciones" y en esta ocasión, "afortunadamente, se ha alegrado mucho de que no haya habido que lamentar nada".
"La cosa va bien para ETA"
El portavoz parlamentario del PP vinculó los atentados cometidos por ETA en los dos últimos días con la reforma del Estatuto catalán. Eduardo Zaplana ha recordado que esta es "la semana del Estatut" y que ETA "quiere estar muy presente" y quiere "mandar recados o avisos" justo en este momento. Respecto a la ausencia de una condena por parte de Zapatero, Zaplana recordó que "las oportunidades cuando se quieren se buscan" y sino es posible, se emite un comunicado.
Por su parte, el presidente del PP, Mariano Rajoy, se mostró convencido de que "ETA ha visto su oportunidad" con el Gobierno socialista actual, en referencia al comunicado que la banda publica en el diario Gara y en el que, según el líder de la oposición, "dice que la cosa va bien". Rajoy aseguró que el PP "no va a colaborar en que se pague un precio político a ETA" porque este partido "tiene una gran responsabilidad, también, con quienes no votaron al PP".
En una visita a La Rioja para participar en una acto con cargos del partido, Rajoy se mostró dispuesto a "librar una batalla para que España vuelva al sentido común". El líder popular llamó la atención acerca de "qué entiende" la banda "por movilizarse" y aseguró que, con el actual Gobierno, "ETA ha visto una oportunidad", algo que no ocurría, a su juicio, con el pacto anti-terrorista, con el que "se le dijo a ETA que no iba a estar en las instituciones". Este pacto, dijo, "le quitó protagonismo" a la banda "y fue lo que le hizo daño".
"La lógica", dijo Rajoy, "dice que sigamos en esta línea". Sin embargo, "Zapatero le ha dado una oportunidad a una organización terrorista y, puede que suene duro", reconoció, "pero hoy ETA está en el Parlamento Vasco y ha decidido quien es su presidente". Y, además, hoy "publica un comunicado donde dice que la cosa va bien, que hay menos presión". Frente a esto, Rajoy aseguró que "el Partido Popular quiere el fin de ETA". Además, indicó que este partido tiene "una gran responsabilidad", también, con quienes no le votaron ya que, incluso estos últimos, según dijo, les piden que defiendan "una política anti-terrorista decente y la unidad nacional". Esto último porque "los españoles creen que España es una nación".