L D (EFE) En declaraciones a Onda Cero , el secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, ha dicho que le "molesta" y le "preocupa" que el presidente del Gobierno, José María Aznar, "esté todo el día interpelándome sobre dónde van a ir los votos del PSE". Sin embargo, la presión del presidente parece haber cristalizado en una respuesta clara de Zapatero, después de que este miércoles anduviera con ambigüedades y juegos de palabras. Con rotundidad, el líder del PSOE ha declarado que sus votos en el País Vasco estarán "al servicio de los planteamientos constitucionalistas".
Zapatero, evidentemente molesto con el presidente Aznar, también dijo que "no se puede tener una relación de confianza" –plasmada en el Pacto antiterrorista– cuando "una de las partes, de una manera absolutamente injustificada e injusta, está todo el día alentando insidias y diciendo qué vamos a hacer o qué no vamos a hacer" en el País Vasco tras las elecciones del 25 de mayo. "Que el señor Aznar esté todo el día interpelándome sobre dónde van a ir los votos del PSE a mí, que sólo he hecho que apoyar al PP en esta materia desde que soy secretario general del PSOE, llega un momento en que me molesta y me preocupa", aseguró.
Por eso Zapatero insistió en que "los votos del PSE van a estar al servicio de los planteamientos constitucionalistas y van a estar al servicio de frenar al señor Ibarretxe y a sus proyectos". Por último, el líder del PSOE destacó que, "oyéndole en campaña", Aznar "parece más el líder de la oposición que yo", lo que en su opinión "le deja en una situación muy complicada para poder tener credibilidad a la hora de tener esa interlocución y de ser lo que es, que parece que en algún momento se olvida, que es el presidente del Gobierno de todos los españoles".
Zapatero, evidentemente molesto con el presidente Aznar, también dijo que "no se puede tener una relación de confianza" –plasmada en el Pacto antiterrorista– cuando "una de las partes, de una manera absolutamente injustificada e injusta, está todo el día alentando insidias y diciendo qué vamos a hacer o qué no vamos a hacer" en el País Vasco tras las elecciones del 25 de mayo. "Que el señor Aznar esté todo el día interpelándome sobre dónde van a ir los votos del PSE a mí, que sólo he hecho que apoyar al PP en esta materia desde que soy secretario general del PSOE, llega un momento en que me molesta y me preocupa", aseguró.
Por eso Zapatero insistió en que "los votos del PSE van a estar al servicio de los planteamientos constitucionalistas y van a estar al servicio de frenar al señor Ibarretxe y a sus proyectos". Por último, el líder del PSOE destacó que, "oyéndole en campaña", Aznar "parece más el líder de la oposición que yo", lo que en su opinión "le deja en una situación muy complicada para poder tener credibilidad a la hora de tener esa interlocución y de ser lo que es, que parece que en algún momento se olvida, que es el presidente del Gobierno de todos los españoles".