(Libertad Digital) En su discurso inicial ante el Comité Federal del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero ha aludido a la política exterior española. "Algún acontecimiento ha puesto de relieve nuestra forma de actuar", ha dicho el presidente del Gobierno antes de rememorar las "dos semanas difíciles" que pasaron los españoles retenidos en Chad. "Tuvimos que hacer intensas gestiones para ver a nuestros compatriotas regresar", ha dicho el presidente arrogándose el protagonismo en la gestión de la crisis.
"Regresaron en dos tiempos, primero cuatro azafatas, y sufrimos las críticas de la oposición cuando se produjo la primera liberación", se ha quejado el presidente, que las ha calificado de "muy duras" y "lacerantes". "Pocos días después", ha dicho, "la diplomacia española demostró que la mejor manera de ser fuerte es trabajar respetando a los demás". Se refería a la financiación de la educación de los 103 niños que iban a ser adoptados de forma ilegal como fórmula para traer a los españoles de vuelta a España.
"Ha sido uno de los episodios más interesantes y una de las lecciones que debiéramos aprender todos. Lo que nos hace ser respetados como país no es la exhibición de determinada fortaleza, sino de la grandeza como país", ha dicho ante la plana mayor del PSOE. En opinión de Zapatero, "si mostramos respeto a todos los países en nuestra forma de relacionarnos, tenemos autoridad para exigirla como hemos hecho en la Cumbre". Una frase con la que introducía el tema del incidente de Chávez con el Rey y la respuesta a Venezuela después de que esta semana el presidente bolivariano haya radicalizado el tono de sus ataques.
"La apuesta por la convivencia y nuestro interés por Iberoamérica nos determina a trabajar para recuperar el clima de confianza", ha dicho el presidente adelantando así que el Gobierno va a continuar sin responder de forma contundente. "Eso es lo que interesa a España, y desde esa perspectiva va a trabajar el Gobierno", ha insistido. Además, ha lanzado un mensaje claramente dirigido al PP: "Les digo que piensen en los intereses de nuestro país, que la responsabilidad de la política exterior está en el Gobierno y que piensen en el ejemplo que hemos puesto hace poco tiempo en el Chad". Aludía así a la petición de los populares para llamar a consultas al embajador tras la escalada verbal de Chávez.
"Estas son las cosas que suceden en la vida pública, que te llevas de vez en cuando alguna sorpresa. Lo hice por convicción, por defender unos principios", ha dicho Zapatero, para quien "todo el mundo, y no señalo a nadie, debería extraer una lección: los españoles y sus líderes políticos podemos discutir con toda la pasión dentro de España y fuera de España nos defendemos unos a otros". "Es muy conveniente, ésa es una de las buenas maneras de patriotismo" y de "convivencia democrática", ha explicado.