Si el alcalde de Madrid tiene una cualidad ésa es la de provocar con sus declaraciones auténticos maremotos internos. Y este domingo lo ha vuelto a conseguir. En una entrevista en ABC, Alberto Ruiz Gallardón se ponía del lado del ministro Rubalcaba, al que mostró su confianza, y negó que nos encontremos ante un segundo tiempo de negociación con la banda terrorista ETA.
"Rubalcaba ha negado siempre la negociación. Y ha negado siempre que el error que se cometió en un pasado reciente se vaya a volver a producir. Y yo a Rubalcaba le creo. Lo que espero es que su palabra, que no tengo ninguna duda que obedece a su pensamiento, sea siempre mayoritaria en el Ejecutivo", afirmó en el diario de Vocento.
De primeras, el alcalde rompía así, y no es la primera vez, con la línea oficial del partido, que no hace mucho marcaba el líder de los populares vascos, Antonio Basagoiti, en este periódico: "me juran y me perjuran que no negociarán, pero no me fío de nada ni de nadie, yo sólo me ceñiré a los hechos", recalcó.
Por ello, no es de extrañar el profundo malestar detectado en varios sectores del partido. Las voces de disconformidad se han reproducido desde Madrid a Bruselas, pasando por el País Vasco. Y es que la fuentes consultadas por Libertad Digital no entienden como el primer edil puede poner "la mano en el fuego" por una persona "con tantas sombras" en su biografía política.
El eurodiputado popular Alejo Vidal Quadras ponía nombre y apellidos a este enfado por las palabras del alcalde. "Todo el mundo tiene derecho a creer a una persona u a otra... yo creo en Jaime Mayor, en las víctimas del terrorismo o en Maite Pagazaurtundua", sentenciaba, en una entrevista con este diario.
Es más, el parlamentario popular replicaba que "decir que crees en Rubalcaba, que confías en su palabra, es una lectura curiosa" a tenor "de lo que conocemos sobre su respeto a la verdad".
Vidal Quadras no se muerde la lengua: "dice eso por razones exclusivamente electoralistas, para ganarse las simpatías del votante de izquierdas", un juego que califica de "muy peligroso" y que "le puede traer problemas con los suyos".
Sin embargo, lo más preocupante a juicio del eurodiputado del PP es que el alcalde niegue que exista una negociación y menosprecie la importancia de la política de beneficios penitenciarios a presos etarras. "No me gustaría abrir un debate sobre lo particular", espeta en ABC. El ex presidente del PPC le responde: "es un hecho notorio que el Gobierno está en un proceso de negociación oculta y que esas excarcelaciones forman parte de un plan".
El veterano político del PP, mano derecha de Jaime Mayor Oreja en la Eurocámara, argumenta esta acusación: "Zapatero ha fracasado en su política económica y social y está poniendo en gravísimo peligro la realidad nacional" por lo que "la única baza que le queda es la solución del problema del terrorismo".
"¡Estamos otra vez en las mismas!", exclama, para a renglón seguido poner el acento en que "todo ello desemboca en el pago de un precio político", lo cual es "indigno e inaceptable.
Por todo ello, considera que la respuesta del alcalde es "evasiva" e insiste en que obedece "a esa intención de complacer a todo el mundo, especialmente a los votantes de izquierda". Un portavoz autorizado de Génova reconoce que las palabras de Gallardón han sido leídas con atención pero que no hay valoración al respecto.