L D (Europa Press) Si el martes Alejo Vidal Quadras criticó que el error de Piqué tenía el "agravante de dar nombres y apellidos", este miércoles ha dado un paso más. En declaraciones al programa La Mañana de la cadena COPE, ha profundizado en lo que, en su opinión, consiste la forma de hacer política del PP en Cataluña.
El vicepresidente del Parlamento europeo no encuentra "ninguna voz" en Cataluña que se alce "con la firmeza adecuada" contra el nacionalismo. "Nadie sabe muy bien qué está pasando –prosiguió Vidal Quadras– porque los mismos que están elaborando el Estatuto tienen montado un lío monumental. Lo que está claro es que por parte de algunos partidos hay una clara voluntad de rebasar la Constitución e introducir elementos confederales, de fragmentar lo que es la unidad de España, en temas fiscales e institucionales, de blindar competencias".
Vidal Quadras denunció que "pasivamente" se está siguiendo en Cataluña la línea marcada por los nacionalistas. "Y el asunto no está en matizar al nacionalismo, corregirlo o atemperarlo. El asunto está en que frente al nacionalismo de identidad hay que plantear una alternativa, hay que plantear un debate ideológico en el mismo núcleo conceptual y moral de ese tipo de nacionalismo que es algo repulsivo y destructivo en sí mismo". Fue entonces cuando entró a analizar el papel del PP catalán.
"Yo siempre he sido partidario de hacer una batalla mucho más activa"
En su opinión, algunos creen que siguiendo esa línea se puede ganar un supuesto electorado de centro. "Pero me parece que esa es una decisión equivocada. Existe una amplia franja de electorado catalán, que yo situaría en un 25 ó 30 por ciento de los votantes en unas elecciones generales y en unas elecciones autonómicas entre un 15 y 20 por ciento que lo que quiere, de una manera inequívoca y firme, es la inserción de Cataluña en el proyecto español; el respeto a la pluralidad cultural y lingüística de Cataluña; a las libertades y los derechos individuales de los catalanes que están en contra del nacionalismo asfixiante, amenazante y agresivo".
En este contexto, dijo admitir que las estrategias y las tácticas de organizaciones como el PP catalán pueden adaptarse a las circunstancias políticas, aunque eso no significa que haya que abandonar la defensa de "unas ideas, unos valores y un programa claro que la gente entienda, que defienda con claridad y firmeza".
"Cuando yo estaba en Cataluña como responsable del partido –recordó– tenía una estrategia distinta a la que se lleva ahora a cabo. Ahora es una estrategia que consiste en no molestar, es decir, estar allí y tener un perfil suave y procurar no incordiar, un poco que te perdonen la vida. Yo siempre he sido partidario de hacer una batalla mucho más activa, aparte que es mucho más divertido y tiene una mejor respuesta de la gente. Pero cada uno tiene su forma de enfocar la estrategia".
La oferta electoral no nacionalista
Dicho esto, el dirigente del PP avisó de que toda esa gente necesita tener representación política, porque actualmente "no se sienten representadas". En este contexto, recalcó que movimientos políticos como los que han puesto en marcha intelectuales como Arcadi Espada y Albert Morera están "señalando esa desconexión amplísima" con parte del electorado catalán.
Al decir de Vidal Quadras, "que haya medio millón de ciudadanos en Cataluña que no se sientan representados en el Parlamento es una patología estructural que, al final ha de tener consecuencias y una de ellas será la creación de un nuevo grupo o plataforma. Pero una cosa es una plataforma y otra organizar un partido con todo lo que significa de recursos, organización territorial y financiación. De ser así, un partido de esas características, una oferta electoral de este tipo obviamente a quien quitará votos es a PSC y PPC".
El aznarismo