Urkullu dice que el rechazo de Egibar a la moción de censura en Mondragón fue por un "calentón"
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, afirmó que el líder de su partido en Guipúzcoa, Joseba Egibar, pudo tener un "calentón" cuando rechazó que el PNV apoyase la moción de censura en Mondragón. Este jueves, el PNV registro en el ayuntamiento guipuzcoano la moción consensuada con el PSE en la que piden a los ediles de ANV que condenen a ETA o dimitan. El presidente de la AVT lo ha calificado de "lavado de cara".
L D (Agencias) En un desayuno con los medios de comunicación, Urkullu reconoció que la gestión de esta cuestión "no lo hemos hecho bien", por lo que se ha podido poner en cuestión el "compromiso ético del PNV", aunque ha "desdramatizado" la influencia que este hecho haya podido tener en el seno del partido.
El presidente de la Ejecutiva del PNV explicó que el pasado 17 de abril la ejecutiva del PNV analizó el caso de Mondragón y los dirigentes nacionalistas concluyeron que, a pesar de que se "necesitaba" una moción en la localidad, después de que su alcaldesa no condenara el atentado de ETA contra el ex edil socialista de la localidad Isaías Carrasco, era también necesario aclarar cuestiones como la necesidad de presentar un plan de gobierno alternativo.
Por ello, según dijo, el EBB (Ejecutiva del partido) no acordó ninguna decisión al respecto dejando la decisión en el aire "en función" de la reunión prevista para el día siguiente en San Sebastián entre el PNV, PSE, PP, EA, IU y Aralar. Según dijo, en esa reunión se pidió por parte del PSE un pronunciamiento basado en el sí o en el no, sin posibilidad de que se presentaran los planteamientos, y ahí "pudo haber un calentón".
Urkullu insistió en que no ha habido ningún problema para reconocer que no se habían calculado debidamente las consecuencias de esa decisión y "no pasa nada". El dirigente nacionalista denunció, sin embargo, las críticas recibidas cuando su partido no tiene ningún acuerdo de gobierno con ANV y se preguntó por los "compromisos" de gobierno municipal que tienen el PSE o EA con ANV.
El dirigente nacionalista explicó que se ha tratado de reconducir algo que no se ha gestionado bien y que para ello, en una ejecutiva extraordinaria del PNV, se acordó la presentación de mociones instando a la dimisión de los cargos de ANV que no condenen la violencia etarra.
Urkullu indicó que ahora es el momento de que todos los partidos se "retraten" y se pongan sobre la mesa los "principios éticos", e indicó que mañana viernes habrá una reunión en el Parlamento vasco para gestionar ese texto de moción, que fue consensuado con el PSE de cara a su presentación en los posteriores días en los ayuntamientos gobernados por ANV, después de que este jueves ya se haya registrado la moción en Mondragón.
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