En una entrevista concedida a Punto Radio, recogida por Europa Press, Urkullu afirmó, además, que la primera decisión que debe adoptar el entorno de ETA es optar, "única y exclusivamente, por las vías políticas" y afirmó que su partido no responderá a ningún llamamiento que suponga "entrar en ningún frente, ni de un signo ni de otro", en referencia al documento de Batasuna hecho público este martes en el diario 'Gara'.
Tras insistir en que el PNV volvería a ir a la manifestación del pasado sábado en San Sebastián, reconoció que la decisión es "difícil de ser entendida" por "los cercanos" al partido.
El líder jeltzale lamentó las críticas a su partido y consideró que "traga mucho" y no se deja llevar "por las vísceras, frente a declaraciones, por ejemplo, como las del ministro del Interior que llegó a decir públicamente que el PNV comparte en la calle la estrategia político-militar de ETA". "¿Cuál es el siguiente paso?, ¿van a ilegalizar al PNV o van a meter a la cárcel a los responsables del PNV?, ¿a dónde vamos con ese tipo de discursos?", preguntó.
En esta línea, precisó que la formación jeltzale trabajará "de manera honesta" frente a "los cálculos de los demás" y pese a "los intentos de desestabilización del PNV que se puedan hacer por parte de otros partidos o de medios de comunicación, en un momento en el que el PNV está siendo el eje central de la política vasca en otras materias".
Iñigo Urkullu aseguró que lo que ha movilizado a su partido no han sido los dirigentes proetarras detenidos, sino los convocantes y el lema de la marcha: 'Todos los derechos para todas las personas. En favor de la libertad'".
Además, recordó que el pasado domingo escribió en su blog que el PNV "habría vuelto acudir" a la manifestación "por las razones de la propia manifestación y por los convocantes, y las razones no son otras que la del derecho de reunión, que es la reivindicación que el PNV hace dentro de lo que es el ejercicio de todas las libertades posibles".
El presidente del EBB se preguntó "por qué han quebrantado la Ley los arrestados". "¿Porque han pasado la frontera cuando tenían la prohibición de pasarla o porque se han reunido con no sé quién?. ¿Han quebrantado la Ley por estar en la sede de un sindicato legal, por estar reunidos en despachos de un sindicato legal, ése es el quebranto de la Ley?", dijo.
Según destacó, "las detenciones se practicaron con cámaras de televisión previamente advertidas de que se van a producir las detenciones". "¿Estamos en una necesidad de espectáculo?, ¿Es real que el motivo de las detenciones de LAB, del sindicato legal, es el de que, en ese momento, están quebrantando la Ley o es anterior el quebranto de la Ley?. Y si ha sido anterior y los tenían fichados o localizados, ¿por qué no se han producido antes?, ¿que es lo que se esconde detrás de todo esto?", preguntó.
Iñigo Urkullu dijo que es eso lo que lleva al PNV a la decisión de acudir a la manifestación, "difícil de ser entendida o comprendida por los propios cercanos" porque se trata "de la gente que estamos hablando, de las cosas que dicen del PNV" y es "muy difícil comprender que el PNV tenga representación en una manifestación" que se ha hecho ver que "es en solidaridad con los detenidos".
Dijo que, a la hora de hacer política, "no se guía por 'si éstos son amigos o no'" o con la intención de "hacer amigos en los representantes de otras ideologías de otras formaciones políticas".
Aunque el presidente del EBB no asistió a la marcha, aseguró que se sintió representado por los presidentes de los consejos territoriales. "Yo no estuve con Batasuna, yo estuve con los sindicatos convocantes y con las personas que secundaron la manifestación en base a los eslogan", reiteró. El líder jeltzale indicó que, "si en el futuro, después de todo lo que le está lloviendo al PNV por lo sucedido el pasado sábado" en la capital guipuzcoana, se hablara "de que un Gobierno español ha hablado con la organización terrorista vasca, lo aplaudiría".
Sobre las palabras de Josu Puelles, hermano de Eduardo Puelles, inspector de Policía asesinado por ETA, que ayer declaró "personas non gratas" a las personas que acudieron a la manifestación del pasado sábado en San Sebastián, el líder del PNV rechazó entrar en la polémica. "La respeto, pero no voy a entrar en una polémica que me parece estéril, dando pie a la utilización de unos sentimientos. Siempre he defendido la libertad y la opción ideológica y política que cualquier víctima pueda tener, entendiendo, además, que es una opción no unívoca, sino que cada víctima es un mundo, como cada persona somos un mundo", añadió.
"Por eso, yo no entro en debates. Me podrá gustar más o menos, pero creo que el tiempo, como siempre, pondrá a cada uno en su sitio, y en este caso, también al PNV en lo que es su compromiso intachable con el respeto a todos los derechos humanos, empezando por el derecho fundamental, que es la vida", concluyó.