En un artículo publicado en su blog personal titulado 'Antes de que el gallo cante dos veces me habrás negado tres', Urkullu asegura que "es cierto" que se reunió con Rubalcaba, en concreto que cenó con el ministro del Interior, y añade que participará en todos los encuentros a los que sea llamado.
Según explica, en esta reunión "que se ha filtrado" se habló "de paz y de normalización política, de la mayoría social vasca, de aprovechar esta oportunidad, si se dan las condiciones, y la primera condición es el respeto a la vida y a los derechos humanos".
Asimismo, agrega, hablaron "del respeto a la pluralidad vasca y a la voluntad de la misma, de la posibilidad de defensa de todas las ideas políticas democráticas, de la necesaria -al menos a juicio del PNV- aplicación de una política penitenciaria distinta, acorde con la letra y el espíritu de la ley, y del papel, sin ningún tipo de protagonismo por nuestra parte, que el PNV está dispuesto a desempeñar".
Por otro lado, se refiere también a la supuesta reunión entre representantes del PSE-EE y de Batasuna, cuya existencia ha sido negada por ambas partes. Tras precisar que no entra en si la noticia de "la reunión entre representantes de Batasuna y del PSE es cierta o no" porque, aunque lo considera "importante, por lo que de cinismo e hipocresía pueda ocultarse, no es hoy lo más importante", el líder del PNV cree que "lo más importante es lo que ha quedado al descubierto con la actitud del PP".
"'O lo desmientes o te vas a casa' es más o menos lo que le han dicho sus socios de legislatura al Lehendakari López. Y lo han desmentido. Y como le pasó a San Pedro puede pasar que antes de que el gallo cantase dos veces ya lo habían negado tres", advierte.
Urkullu reconoce que "es difícil mantener a toda costa el poder, con un socio, el PP, al que sólo les une el ansia desmedida por desplazar al PNV de la responsabilidad de gobierno formal de las instituciones, y, al mismo tiempo, intentar ser los líderes de la progresía vasca, del autogobierno, de la normalidad, de la transversalidad, de la senda estatutaria y del "acuerdo de Ajuria Enea".
En ese sentido, lamenta que el pacto con el PP "maniata a todo un Gobierno vasco, a su lehendakari y a todo un partido socialista en un momento crucial para Euskadi, en el que debería liderar no sólo económica y socialmente a esta sociedad, también políticamente, incluido el aprovechamiento de este tiempo de oportunidad que hasta el final de legislatura de Zapatero hay en un escenario facilitado por el PNV, si se dan las circunstancias, para profundizar en algo más que la pretensión de la 'derrota policial' de ETA".
Urkullu critica que el PP no permite a los socialistas "ni hacer lo que debería ser su obligación, hablar y dialogar con todos para tratar de allanar el camino de la normalización en la convivencia política". Por otro lado, recuerda que el PNV ha hablado con la izquierda abertzale y asegura que lo seguirán haciendo, al igual que con el resto de representantes de "sensibilidades ideológicas" de Euskadi. "Desde la discreción sí o no, según las circunstancias. Pero no desde el miedo a que nos 'pillen. No nos gusta pasar de la discreción a la hipocresía aunque algunos se sientan muy cómodos en tal ejercicio", ha concluido.