Un día después de la reunión con Zapatero, Ibarretxe comunica al PNV los pasos de la "pacificación"
Tres días después de la reunión con ETA-Batasuna y al día siguiente de la polémica entrevista con Zapatero en La Moncloa, Ibarretxe ha presidido la Asamblea Nacional del PNV. Sin una sola crítica al Gobierno de España, el lehendakari en funciones y Jose Jon Imaz han comunicado a su partido las condiciones para lo que llaman "pacificación y normalización": acabar con la Ley del Partidos y el Pacto Antiterrorista y pedir a ETA el "fin de la violencia" a cambio, de momento, de "negociar la situación de los presos y exiliados". La otra condición es legalizar a Batasuna.
L D (Europa Press) La Asamblea Nacional de EAJ-PNV, reunida este viernes por la tarde por espacio de dos horas para tratar la situación política post-electoral, emitió un comunicado en el que señala que la "normalización política" pasa por la eliminación de la Ley de Partidos y la pacificación por el abandono de la violencia y la retirada definitiva de la escena política vasca de ETA.
En el encuentro, que se inició a las siete y media de la tarde en Sabin Etxea, se analizaron los encuentros mantenidos con otras formaciones y agentes políticos, y estudiaron las perspectivas de futuro. Los ponentes fueron el presidente del EBB, Josu Jon Imaz, y el lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe. No se menciona en el comunicado la reunión con Zapatero pero a juzgar por lo expuesto, los términos aprobados responderían al contenido de la entrevista.
En esa nota la Asamblea Nacional de EAJ-PNV afirma que los nuevos tiempos exigen la "eliminación real de medidas excepcionales que la sociedad vasca nunca llegó a aceptar y que incluso la sociedad española empieza a considerarlas ya como impropias de un Estado de Derecho". "La normalización política pasa sin duda, también, por la superación del mal llamado Pacto Antiterrorista y la Ley de Partidos, como exponentes de una estrategia política propia del pasado", añade.
Por otra parte, señala que "la sociedad vasca vive momentos de grandes expectativas de pacificación, entendiendo por pacificación terminar, de una vez por todas, con la amenaza de la violencia como instrumento para la consecución de objetivos políticos".
Sobre la llamada "pacificación", el comunicado dice textualmente lo siguiente: "La pacificación va a requerir abandonar la violencia, reconocer los daños causados a las víctimas y negociar la situación de los presos y exiliados". Le pide a la banda terrorista que no frustre este proceso y le hace llegar el mensaje de que "la sociedad vasca le exige muestras fehacientes de su retirada definitiva de la escena política vasca". En otras palabras, una tregua con amnistías y acercamiento de presos, justo los términos en los que, según la AVT, se expreso el Alto Comisionado para las Víctimas del Terrorismo, Gregorio Peces Barba.
En cuanto a los resultados de los comicios del 17 de abril, la asamblea de la formación nacionalista asume que la sociedad vasca ha conferido una vez más a la coalición constituida por PNV y EA "la confianza para liderar la complejidad del nuevo momento". "Los datos son inequívocos en este sentido, -prosigue- no en vano la coalición ha conseguido casi tanto apoyo como la suma de la segunda y tercera fuerzas, y representa prácticamente el 39% del total de votos emitidos".
Así, el PNV entiende, también, que la pluralidad de la sociedad reclama de los partidos políticos que "abandonen el camino del enfrentamiento y la estrategia del bloqueo y el veto; que promuevan el diálogo sin exclusiones entre las distintas formaciones y que, siendo realmente conscientes de la responsabilidad que la propia sociedad ha puesto en sus manos, trabajen para alcanzar acuerdos estables".
A su juicio, por encima de cualesquiera diferencias, "el conjunto de la sociedad quiere y desea alcanzar una situación de plena normalización política, entendiendo como normalización política acordar, entre los agentes políticos con representación democrática, un marco de relaciones que acepte la pluralidad de la sociedad vasca, su capacidad de decisión y el principio de no unilateralidad".
El presidente del EBB, Josu Jon Imaz, y el lehendakari en funciones, Juan José Ibarretxe, reiteraron ante la Asamblea Nacional de EAJ-PNV su deseo de trasladar a la sociedad vasca un mensaje de serenidad, "en el convencimiento de que Euskadi vive una oportunidad, largamente esperada, que no cabe desaprovechar".
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