L D (Agencias) Un artefacto de fabricación casera explotó sobre las tres de la pasada madrugada ante la céntrica sede del PP en la calle Oliva de Pontevedra. No causó daños personales, aunque sí importantes desperfectos materiales. Algo antes, sobre las 2,52, también explotó un artefacto que rompió la cristalera de la sede del PP en la localidad pontevedresa de Moraña. Además, sobre las 3,13 horas, los bomberos de Santiago de Compostela fueron alertados por una vecina de que había sido arrojado un cóctel molotov contra la Dirección General de Estructuras Pesqueras de Santiago, situada en el barrio compostelano de Sar. Los daños no fueron muy cuantiosos, pero la puerta del local quedó ennegrecida, ya que se quemó la alfombra del interior.
El consejero de Pesca, Enrique López Veiga, admitió en declaraciones a la Radio Galega que los daños no han sido muy graves, pero "el destrozo en la entrada es suficiente y, si llega a colarse el fuego un poco más al interior, aquí hay mucho papel, muchísimo plástico" y las consecuencias podrían haber sido mayores. "Nunca estas cosas son de risa ni leves: una bomba es una bomba, un cóctel molotov es un cóctel molotov", señaló el conselleiro. Además, López Veiga dijo que "no podemos estar en permanente estado de agitación", e hizo un llamamiento "a ciertos líderes de la oposición" que están, "de alguna manera, por acción o por omisión, propiciando este clima".
Por su parte, el presidente de la agrupación local del PP de Pontevedra, Juan Luis Pedrosa, indicó que quien dejó el artefacto a la puerta de la sede "tiene que ser alguien del lugar, porque muchos pontevedreses desconocen que el partido tiene allí su nueva sede, desde hace apenas seis meses, y carece de cualquier tipo de identificación exterior". Pedrosa destacó que no es la primera vez que es atacada una sede del PP en Pontevedra, ya que a finales de año se registraron artefactos caseros ante sedes populares lo que, según dijo, en aquella ocasión se relacionó con la crisis del "Prestige", aunque ahora se vinculan a la postura del PP ante el conflicto de Irak.
Vázquez recuerda la “batasunización”
El alcalde de La Coruña, el socialista Francisco Vázquez, condenó los atentados de la pasada madrugada contra sedes del PP y de la Xunta y pidió que sus autores sean considerados "terroristas". En declaraciones a los medios de comunicación, Vázquez califica los ataques al PP en Galicia como "un problema de terrorismo".
A su juicio, los responsables de estos actos son "grupúsculos independentistas vinculados al nacionalismo" que de forma constante se mueven hacia la "violencia física". Asimismo, consideró que existen en Galicia muchos planteamientos que ofrecen un "caldo de cultivo" a estos "grupos independentistas" que, según afirmó coincidiendo con el juicio de Mayor Oreja, intenta "batasunizar" esta Comunidad Autónoma. El alcalde coruñés censuró que estos "planteamientos extremistas" expresados en insultos y ataques a sedes de partidos democráticos cuenten "con la impunidad de instituciones" que no adoptan las medidas necesarias para detener a los responsables.
El consejero de Pesca, Enrique López Veiga, admitió en declaraciones a la Radio Galega que los daños no han sido muy graves, pero "el destrozo en la entrada es suficiente y, si llega a colarse el fuego un poco más al interior, aquí hay mucho papel, muchísimo plástico" y las consecuencias podrían haber sido mayores. "Nunca estas cosas son de risa ni leves: una bomba es una bomba, un cóctel molotov es un cóctel molotov", señaló el conselleiro. Además, López Veiga dijo que "no podemos estar en permanente estado de agitación", e hizo un llamamiento "a ciertos líderes de la oposición" que están, "de alguna manera, por acción o por omisión, propiciando este clima".
Por su parte, el presidente de la agrupación local del PP de Pontevedra, Juan Luis Pedrosa, indicó que quien dejó el artefacto a la puerta de la sede "tiene que ser alguien del lugar, porque muchos pontevedreses desconocen que el partido tiene allí su nueva sede, desde hace apenas seis meses, y carece de cualquier tipo de identificación exterior". Pedrosa destacó que no es la primera vez que es atacada una sede del PP en Pontevedra, ya que a finales de año se registraron artefactos caseros ante sedes populares lo que, según dijo, en aquella ocasión se relacionó con la crisis del "Prestige", aunque ahora se vinculan a la postura del PP ante el conflicto de Irak.
Vázquez recuerda la “batasunización”
El alcalde de La Coruña, el socialista Francisco Vázquez, condenó los atentados de la pasada madrugada contra sedes del PP y de la Xunta y pidió que sus autores sean considerados "terroristas". En declaraciones a los medios de comunicación, Vázquez califica los ataques al PP en Galicia como "un problema de terrorismo".
A su juicio, los responsables de estos actos son "grupúsculos independentistas vinculados al nacionalismo" que de forma constante se mueven hacia la "violencia física". Asimismo, consideró que existen en Galicia muchos planteamientos que ofrecen un "caldo de cultivo" a estos "grupos independentistas" que, según afirmó coincidiendo con el juicio de Mayor Oreja, intenta "batasunizar" esta Comunidad Autónoma. El alcalde coruñés censuró que estos "planteamientos extremistas" expresados en insultos y ataques a sedes de partidos democráticos cuenten "con la impunidad de instituciones" que no adoptan las medidas necesarias para detener a los responsables.