L D (Nacho G. Mostazo) El director del Protección de Datos de Telefónica Móviles, Jorge Ferre Molto, ha sido el último compareciente ante la Comisión de Investigación de la Asamblea de Madrid, que el próximo lunes aprobará el dictamen con sus conclusiones. En su declaración, Ferre Molto ha dicho que “todas las pruebas” que tiene su compañía contra los dos ex empleados de Telefónica Móviles que fueron despedidos bajo la acusación de espionaje “son sólidas”, están “basadas en la técnica” y “a disposición de la autoridad judicial”, que las mantiene "bajo secreto sumarial", en los dos juzgados de Madrid donde hay abiertas diligencias por este caso.
En relación al despido de Alberto Moreno Lucas y Álvaro Sáez de Castro, Ferre Molto añadió con claridad que, “como han sido esos usuarios, les hemos señalado”, para subrayar que su compañía actuó “correctamente” y “con toda celeridad” al abrir una investigación interna tras conocer la filtración de llamadas de partidos políticos, al publicarse en diferentes medios de comunicación ( Cadena SER , diario El País y diario El Mundo ). Este tipo de prácticas de espionaje y filtración no es algo habitual en Telefónica Móviles, sino un hecho "puntual" y "excepcional", según Ferre Molto, quien subrayó que, hasta ahora, ésta ha sido la primera vez que se tiene constancia de una actuación de estas características.
El director de Protección de Datos de Telefónica Móviles calificó a los dos ex empleados de “desleales a la compañía” ya que incumplieron normas obligatorias y básicas para trabajar en esta empresa, según dijo. Ferre Molto dedicó la mayor parte de su exposición a asegurar que el sistema de seguridad de la compañía en la que trabaja tiene todas las garantías, ya que está sujeto a auditorías externas e internas. Con respecto a las auditorías externas, Ferre Molto citó una evaluación reciente de la Agencia de Protección de Datos, mientras que sobre las internas, dijo que el año pasado su propio departamento hizo un análisis completo que confirmó dichas garantías.
Suárez empieza a sospechar también
Durante su turno de preguntas, el portavoz de Izquierda Unida, Luis Suárez, se interesó por contrastar los argumentos de los trabajadores despedidos, que dijeron ante la Comisión que sus claves de usuario las conocían todos sus compañeros en el departamento. En este sentido, preguntó a Ferre Moltó si alguien más, aparte del propio trabajador, conoce su clave de usuario, a lo que el directivo de Telefónica Móviles respondió que “los accesos son proporcionados de acuerdo a la función que desempeña (cada trabajador) en la compañía”, que las claves “no están relacionadas con nivel de jerarquía”, y que “seguramente” no hay ningún “superusuario” que tenga acceso a todos los datos.
Asimismo, desmintió la información ofrecida por el comité de empresa de Telefónica Móviles, así como por Moreno Lucas y Sáez de Castro, sobre que las claves de los empleados están colgadas en la red interna de la compañía. Suárez dijo que las consecuencias de una "negligencia de dos trabajadores medios" –de quienes dijo que son "cabezas de turco", como ellos mismos se definieron ante la Comisión– no habrían dado nunca como resultado un cambio tan sustancial en el caso que investiga la Asamblea, e insinuó que no se puede hacer responsables exclusivos a estos dos trabajadores despedidos, si no que habría que considerar que hubiera “gente interesada o instituciones poderosas” con motivos para desvelar aquellos datos.
Por su parte, el portavoz del PP, Antonio Beteta, utilizó su turno de preguntas para indagar en una de las sospechas del Partido Popular: que el PSOE filtró a la Cadena SER las llamadas de Eduardo Tamayo porque, como ha reconocido incluso el propio Rafael Simancas, la Federación Socialista Madrileña era la propietaria de dicho teléfono móvil y pagaba sus facturas. En este sentido, Beteta preguntó al directivo de Telefónica si el PSOE pudo obtener el listado de llamadas de Tamayo “legalmente, con su pin y su clave” de cliente corporativo, a lo que Ferre Moltó dijo que “teóricamente, podría ser así, pero no lo sé”. En este punto Beteta le pidió que a la mayor brevedad se enterase de esa respuesta, pero Ferre le dijo que toda la información que está en poder del juez está sometida a secreto sumarial, y el portavoz popular anunció que remitirá un escrito a Telefónica Móviles en el que solicitará los datos.
El portavoz socialista, Modesto Nolla, cuyo partido ya ha demostrado que no tiene ningún interés en ahondar en esta parte de la investigación por lo que le podría afectar directamente, insistió en que su grupo exigirá explicaciones sobre por qué Telefónica Móviles no cumplió las normas de seguridad y declino hacer más preguntas a la espera del resultado judicial.
En relación al despido de Alberto Moreno Lucas y Álvaro Sáez de Castro, Ferre Molto añadió con claridad que, “como han sido esos usuarios, les hemos señalado”, para subrayar que su compañía actuó “correctamente” y “con toda celeridad” al abrir una investigación interna tras conocer la filtración de llamadas de partidos políticos, al publicarse en diferentes medios de comunicación ( Cadena SER , diario El País y diario El Mundo ). Este tipo de prácticas de espionaje y filtración no es algo habitual en Telefónica Móviles, sino un hecho "puntual" y "excepcional", según Ferre Molto, quien subrayó que, hasta ahora, ésta ha sido la primera vez que se tiene constancia de una actuación de estas características.
El director de Protección de Datos de Telefónica Móviles calificó a los dos ex empleados de “desleales a la compañía” ya que incumplieron normas obligatorias y básicas para trabajar en esta empresa, según dijo. Ferre Molto dedicó la mayor parte de su exposición a asegurar que el sistema de seguridad de la compañía en la que trabaja tiene todas las garantías, ya que está sujeto a auditorías externas e internas. Con respecto a las auditorías externas, Ferre Molto citó una evaluación reciente de la Agencia de Protección de Datos, mientras que sobre las internas, dijo que el año pasado su propio departamento hizo un análisis completo que confirmó dichas garantías.
Suárez empieza a sospechar también
Durante su turno de preguntas, el portavoz de Izquierda Unida, Luis Suárez, se interesó por contrastar los argumentos de los trabajadores despedidos, que dijeron ante la Comisión que sus claves de usuario las conocían todos sus compañeros en el departamento. En este sentido, preguntó a Ferre Moltó si alguien más, aparte del propio trabajador, conoce su clave de usuario, a lo que el directivo de Telefónica Móviles respondió que “los accesos son proporcionados de acuerdo a la función que desempeña (cada trabajador) en la compañía”, que las claves “no están relacionadas con nivel de jerarquía”, y que “seguramente” no hay ningún “superusuario” que tenga acceso a todos los datos.
Asimismo, desmintió la información ofrecida por el comité de empresa de Telefónica Móviles, así como por Moreno Lucas y Sáez de Castro, sobre que las claves de los empleados están colgadas en la red interna de la compañía. Suárez dijo que las consecuencias de una "negligencia de dos trabajadores medios" –de quienes dijo que son "cabezas de turco", como ellos mismos se definieron ante la Comisión– no habrían dado nunca como resultado un cambio tan sustancial en el caso que investiga la Asamblea, e insinuó que no se puede hacer responsables exclusivos a estos dos trabajadores despedidos, si no que habría que considerar que hubiera “gente interesada o instituciones poderosas” con motivos para desvelar aquellos datos.
Por su parte, el portavoz del PP, Antonio Beteta, utilizó su turno de preguntas para indagar en una de las sospechas del Partido Popular: que el PSOE filtró a la Cadena SER las llamadas de Eduardo Tamayo porque, como ha reconocido incluso el propio Rafael Simancas, la Federación Socialista Madrileña era la propietaria de dicho teléfono móvil y pagaba sus facturas. En este sentido, Beteta preguntó al directivo de Telefónica si el PSOE pudo obtener el listado de llamadas de Tamayo “legalmente, con su pin y su clave” de cliente corporativo, a lo que Ferre Moltó dijo que “teóricamente, podría ser así, pero no lo sé”. En este punto Beteta le pidió que a la mayor brevedad se enterase de esa respuesta, pero Ferre le dijo que toda la información que está en poder del juez está sometida a secreto sumarial, y el portavoz popular anunció que remitirá un escrito a Telefónica Móviles en el que solicitará los datos.
El portavoz socialista, Modesto Nolla, cuyo partido ya ha demostrado que no tiene ningún interés en ahondar en esta parte de la investigación por lo que le podría afectar directamente, insistió en que su grupo exigirá explicaciones sobre por qué Telefónica Móviles no cumplió las normas de seguridad y declino hacer más preguntas a la espera del resultado judicial.