LD (Pablo Montesinos) Jornada de despachos y teléfonos en el Grupo Popular. El presidente del PP de Canarias, José Manuel Soria, ha conseguido que los populares en el Congreso no vayan a votar este miércoles en contra de la enmienda de Coalición Canaria para crear un cuerpo policial autonómico en las Islas, a semejanza de la Ertzaintza o los Mossos de Escuadra. Su intención era que Soraya Sáenz de Santamaría dijera "sí" al nuevo cuerpo policial pero Ignacio Cosidó, responsable de Interior del PP en la Cámara Baja, abortó el intento.
Los hechos acontecieron en la reunión del Grupo Parlamentario, exclipsada por la crisis interna que sufre la bancada popular. Entonces, Cosidó tomó la palabra para pedir explicaciones por el apoyo del Grupo Popular a la citada enmienda, enmarcada en el debate de los Presupuestos Generales del Estado. El encargado de la Cuentas Públicas, Vicente Martínez Pujalte, decía entonces que "no tenía constancia" de haber votado esa enmienda, y se excusó recordando que son "más de tres mil" las propuestas formuladas. Un "error" de más de cuatro millones de euros, dotación que piden los nacionalistas para sus agentes autonómicos.
Por ello, la dirección del grupo se reunía de urgencia y decidía abtenserse.Una decisión en la que, según ha podido saber Libertad Digital, también ha tenido que ver el líder de los popular canarios, que presionó a Saénz de Santamaría para que no votaran en contra. Soria estaba detrás del voto positivo de la enmienda y, "tras conocerse el pastel", consiguió que el Grupo Popular avalara la abstención.
Coalición Canaria también le delata: el Partido Popular de Canarias ya ha votado a favor de la creación de la policía autonómica en las cortes autonómicas. "Contamos con el apoyo explícito de Soria", reiteran desde la sede de los nacionalistas.
En la redacción de la ponencia política del PP, que posteriormente sería aprobada en el Congreso de Valencia, Soria ya intentó introducir la reivindicación nacionalista. Según apuntan estas mismas fuentes, el actual vicepresidente del Ejecutivo canario intentó, sin éxito, que se diera el visto bueno a la creación del cuerpo policial autonómico, pero el texto fue enmendado. María San Gil ya lo advirtió, y recibió los improperios del líder popular canario.
Así las cosas, Soria no ha conseguido el apoyo explícito de su partido pero sí una abstención que servirá para "no incomodar" a Coalición Canaria.
El discurso del PP, ¿claro?
Con estos movimientos, parece difícil defender que el PP mantiene hoy por hoy un dicurso firme con respecto a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado. Fuentes del Grupo Popular consultadas por Libertad Digital consideran "un error" la posible aprobación de la enmienda nacionalista y creen que la abstención es suficiente para "no condicionar el discurso futuro".
Este diputado recalca que la posición del PP es "aumentar los efectivos policiales, su estryuctura y sus equipos" así como el más efusivo respaldo a la Policía Nacional y a la Guardia Civil. "Defendemos el actual modelo policial con mucha firmeza, no nos parece que el modelo adecuado sea la proliferación de policías autonómicas", agrega. No entra a valorar las presiones de Soria a Soraya Sáenz de Santamaría.
Coalición Canaria, por su parte, definde la inclusión del cuerpo autonómico. Fuentes consultadas por este periódico explican que, a día de hoy, las Islas cuentan con un déficit de más de 1.400 efectivos policiales y que el Ministerio del Interior les tiene olvidados. Una situación de inseguridad que, según dicen, quedaría subsanada con una policía exclusiva. Aquí engloban también a la inmigración y "los diez millones de turistas" que reciben anualmente. El PP también considera que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero "desatiende a Canarias" pero cree, en principio, que la solución pasaría por aumentar los efectivos de Policía Nacional y Guardia Civil.
Un debate que llega en plena crisis interna de la bancada popular. De hecho, fuentes consultadas aseguran que Sáenz de Santamaría está "agotada" ante los muchos frentes a abiertos. Dirigentes del PP consideran que esta enmienda es un capítulo más de la deriva ideológica a la que Mariano Rajoy somete al partido. "Es una presión de Soria que ataca al mismísimo modelo policial, qué más vamos a tener que soportar", exclaman.