L D (Agencias) La presidenta del PP en el País Vasco, María San Gil, ha advertido de que no se está abriendo un proceso de paz sino "de autodeterminación" del País Vasco, en el que el primer paso será la redacción de un nuevo Plan Ibarretxe con la participación de Batasuna-ETA. Este nuevo plan separatista, alertó San Gil, definirá al País Vasco como nación y sentará las bases del derecho de autodeterminación. La líder de los populares vascos explicó que este es el motivo por el que el nacionalismo vasco ha seguido "como un espejo" el proceso de reforma del Estatuto catalán.
María San Gil, que ofreció una conferencia en el Fórum Europa, recordó que el Gobierno vasco ha declarado que es "innegociable" el reconocimiento del derecho de autodeterminación para el País Vasco y que esto no es algo nuevo, como tampoco la estrategia de ETA, que es siempre la misma, dijo.
"Quien ha cambiado es el PSOE", sentenció San Gil, que explicó que la actitud del PSE es "jugar a ser nacionalista" por estar dispuesto a participar en una "mesa extraparlamentaria" de negociación política en la que se siente también ETA-Batasuna y que siga "el orden del día" que marquen los terroristas. "Ha abandonado claramente la idea de ser alternativa", agregó. "Nosotros queremos una disolución incondicional del terrorismo: que dejen las armas, pidan perdón y pasen a manos de la Justicia. 30 años después, la sociedad democrática lo mínimo que puede pedir es esto", concluyó la presidenta del PP vasco.
Recordó que se trata de una decisión que corresponde adoptar al juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande Marlaska, aunque subrayó que Otegi es el "líder de una organización terrorista que está declarada ilegal por los tribunales españoles y que figura en la lista europea de organizaciones terroristas". "Es el juez quien tiene que decidir y yo espero que cumpla la ley, pero es él el que tiene que interpretarla", insistió.
Preguntado si esta situación puede afectar al mal llamado proceso de paz en el País Vasco, dijo que le parece "grotesco" y recordó que con el Pacto Antiterrorista el objetivo era la "derrota de ETA y ahora ha sido sustituido por la negociación" con la banda. Tras calificarlo de "inadmisible", Rajoy apuntó que al terrorismo "hay que derrotarlo con todos los instrumentos de la Ley y del Estado de Derecho". "En los últimos años se había avanzado mucho por la vía policial, judicial e internacional, y se había conseguido que Batasuna no se pudiera presentar a las elecciones", matizó. Sin embargo, continuó, actualmente el "escenario es distinto, nadie lo entiende porque es difícil comprender qué quiere hacer el Gobierno".
"No cabe hablar de proceso de paz", subrayó Rajoy, que dijo que hay que hablar de "cómo se recupera la libertad de una mayoría de ciudadanos decentes".