El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba ha sido entrevistado en Punto Radio, donde su participación se ha basado, casi exclusivamente, en desmentir la oleada de nuevos datos relacionados con el chivatazo a ETA.
En primer lugar ha defendido al secretario de Estado, Antonio Camacho, en respuesta a las informaciones publicadas por El Mundo que afirman su implicación en las llamadas previas a los hechos sucedidos en Irún. Se ha respaldado en que este periódico ha titulado "con malicia" puesto que solo "una llamada de dos minutos al secretario de Estado de Seguridad demuestra que fue un día tranquilo". Además, ha apuntalado la defensa de Camacho afirmando que "nunca estuvo investigado".
Rubalcaba tampoco ha aceptado la información publicada por ABC, que da cuenta de las presiones a Luciano Varela, instructor de la querella contra Garzón, para que archive la causa a cambio de un sillón en el Tribunal Constitucional. "No es un magistrado que se deje presionar" ha dicho Rubalcaba .
Según el ministro, "es rotundamente falso" que Baltasar Garzón mantenga "dormido" el caso del chivatazo, y explica la antipatía general hacia el juez estrella: "Todo el mundo tiene tanta manía a Garzón, porque no se casa con nadie. Supongo".