(Libertad Digital) La diputada socialista contesta a López desde el diario ABC en un artículo en el que desmonta uno por uno los argumentos que esgrimía el secretario general de los socialistas vascos en páginas de Gara, declaraciones que son, a juicio de Rosa Díez, "una ofensa a la historia del socialismo vasco". En concreto, Díez se refiere a tres aspectos de los que se habla en la entrevista: que no habrá "muros insalvables en el País Vasco, los ataques de López al Foro de Ermua y el aspecto más polémico, la puerta que López deja abierta a un futuro acuerdo de Gobierno entre el PSE y Batasuna-ETA.
Las afirmaciones de Patxi López de que "no habrá muros de contención insalvables" si así lo quieren "todos los vascos", son calificados por Rosa Díez como un "analfabetismo funcional", pues los muros de los que habla López son las "leyes" que se ponen "para poner coto a las reivindicaciones ilegítimas de individuos o colectivos", o "entreguismo al nacionalismo". La socialista se muestra especialmente preocupada con esta posibilidad y recuerda que en nombre de "todos los vascos" se han amparado los asesinos de ETA o los planteamientos de Ibarretxe para "excluirnos a los no nacionalistas".
Rosa Díez responde también a López cuando afirmaba el domingo que "no sabía que el Foro de Ermua había nacido para reclamar la unidad de España con la derecha más reaccionaria", en alusión a una manifestación celebrada días antes en Madrid. Díez critica con dureza la similitud de los términos de López (derecha "reaccionaria") con los empleados por el diario que le entrevista y el entorno proetarra en general, que "han acuñado hace tiempo ese concepto" "para justificar algunos de sus atentados". Atentados que mataron, según recuerda Díez, a Fernando Buesa, hermano del presidente de la asociación.
Pero las palabras más duras de la socialista llegan cuando critica la ambigüedad de López cuando es interpelado sobre un posible pacto entre PSE y Batasuna. Rosa Díez critica que se ampare en la "libertad de pactos" que hay en la democracia, pues esa libertad se refiere a los "partidos democráticos". Batasuna "no lo es", sentencia Díez antes de enumerar las consecuencias de la sentencia del Supremo en 2003 que ilegalizaba el partido. "No me olvido de que Batasuna es ETA", afirma Díez, ni de "las palabras de los dirigentes de Batasuna tras los crímenes" ni "de quiénes brindan ante nuestros muertos".
Por todas estas razones y "el profundo desasosiego" e "inmenso dolor" que le causan, Díez se siente, según afirma, "obligada a levantar mi voz" para "rechazar" con contundencia "los planteamientos del secretario general de mi partido en Euskadi expresados en la mencionada entrevista". "No he pedido el voto para justificar pacto alguno con ellos" ni para "que se utilice Gara para señalar de forma tendenciosa al Foro de Ermua".