L D (Agencias) En declaraciones en Onda Cero recogidas por Europa Press, Mariano Rajoy indicó que aunque el encuentro con representantes de Batasuna lo mantengan miembros del PSE, ese partido "a todos los efectos es lo mismo" que el PSOE y recordó que además el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, ha avalado esas conversaciones. En este sentido, advirtió de que "nadie, ni el presidente del Gobierno, está por encima de la ley".
También calificó de "absurdo" la explicación dada por los socialistas para justificar esa reunión, en el sentido de que el objetivo es decirle a Batasuna que tiene que cumplir la ley y rechazar la violencia para convertirse en una fuerza legal. "Batasuna tiene un sinfín de posibilidades todos los días (...) de dejar la violencia y saben que lo que tienen que hacer es dejar la violencia y que no podrán hacer política hasta que ETA deje de matar y hasta que vuelva la libertad al País Vasco", señaló.
"Lo que ha habido es un incumplimiento clarísimo, un engaño al conjunto de los españoles y desde luego estamos ante una clarísima violación de la ley", aseveró Rajoy, que apuntó que "en este momento la Unión Europea no tiene contactos con Hamas". Rajoy se quejó de que lo que se aplica en Europa a Hamas "parece que para aquí no vale, que aquí se puede hablar con organizaciones declaradas ilegales, que son terroristas según los tribunales y que figura en la lista europea de organizaciones terroristas".
Los terroristas "tienen agarrado" a Zapatero
Además, Rajoy aseguró que se ha "dado aire" a ETA y a Batasuna y recalcó que, pese a que estaban en "una situación muy difícil", ahora "han asumido un protagonismo que no tenían, fijan la agenda y tienen agarrado al Gobierno de España". "El Gobierno está totalmente en manos de la organización terrorista, porque ha aceptado su chantaje y ha aceptado su presión", afirmó Rajoy quien añadió que el Ejecutivo "ha decidido" reunirse con Batasuna "ante las amenazas de esta organización".
A su juicio, la posición "lógica, la decente, la moral y sobre todo, la más eficaz", habría sido la de no aceptar esa reunión, porque, en ese caso, el Gobierno "tendría detrás a la inmensa mayoría de los españoles y pondría a Batasuna en una situación imposible". Reunirse con los batasunos es, según el líder popular, "faltar a la palabra que el presidente ha dado a los españoles y liquida el pacto por las Libertades y contra el Terrorismo". "Es incumplir la ley", insistió.
El objetivo del PSE, "calmar las aguas"
Por su parte, el portavoz de la Ejecutiva del PNV, Iñigo Urkullu, consideró que el PSE-EE, al anunciar que se reunirá con Batasuna, ha pretendido "calmar las aguas del mundo de Batasuna" ante la citación de ocho miembros de la mesa nacional ante el magistrado Fernando Grande Marlaska y las advertencias de la formación terrorista sobre que el proceso se encontraba en un momento de "extrema gravedad".
En una entrevista concedida a Antena 3, recogida por Europa Press, Urkullu declaró: "Creo que el PSE-EE también veía la necesidad de aportar un grano de arena para calmar las aguas del mundo de Batasuna. Por eso, es por lo que nosotros, como PNV, también creemos que hay una escenificación entre el PSE-EE y Batasuna". No obstante, dijo que, "evidentemente, si todo esto suma para consolidar los pasos que se están dando para un proceso de pacificación y que, de alguna manera, se desatasque el debate político en la sociedad vasca, bienvenido sea".