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Rajoy acusa a Zapatero de ponerse "en manos de ETA" y da por "liquidado" el Pacto Antiterrorista

En La Mañana de Federico Jiménez Losantos, el líder del PP ha respondido al anuncio que el presidente del Gobierno cuando dijo que "alcanzar el fin de la violencia" será una tarea que "lleve tiempo", pero que no impedirá "que el dialogo político comience". Rajoy ha dejado claro que "esa reunión" del PSE con Batasuna-ETA "sobrepasa las líneas rojas que le dio el PP" y añadió que si se produce "yo quedo liberado de cualquier tipo de apoyo al Gobierno". Además, advirtió de que los socialistas que se reúnan con los miembros de un grupo terrorista pueden ser citados por el juez. También hubo lugar para la autocrítica: "Podía haber hecho un Debate sobre la Nación mejor".

(Libertad Digital) La entrevista a Mariano Rajoy en La Mañana de la COPE, comenzó con una descripción del presidente del PP de lo afirmado por Zapatero en el Debate del Estado de la Nación. "Lo que ha dicho, que venía siendo anunciado por Patxi López y José Blanco, es que va a celebrarse una reunión con una organización declarada terrorista e ilegal que se llama Batasuna", resumió el líder popular. Eso significaría un "reconocimiento como interlocutor político" a los batasunos y, por tanto, una "violación del Pacto Antiterrorista", indicó Rajoy, que subrayó que "sobrepasa las líneas rojas del apoyo del PP".

Frente a esta actuación del jefe del Ejecutivo, la "posición" de Rajoy "ha sido la misma desde el día 22", fecha del comunicado de ETA. "A la hora del comunicado di una rueda de prensa, dos horas después" repitió lo dicho, "días más tarde" tuvo una "reunión con Zapatero y volvió "a decir lo mismo", y en su "intervención del martes" dijo "lo mismo", enumeró el líder del PP, "que daba mi apoyo a Zapatero si se trataba de conocer las intenciones de ETA de dejar armas, disolver la banda y pedir perdón a las víctimas". Y subrayó que le indicó que "no prestaría apoyo para un pago político", una postura que sigue "manteniendo".
 
"Pero Zapatero ha traspasado las líneas rojas", insistió. "Es evidente que manteniendo lo mismo que dije, como él (en referencia a Zapatero) ha cambiado las circunstancias, estamos en una situación diferente y no lo puedo apoyar", manifestó Rajoy, quien añadió que tiene sus "serias dudas de que no puedan ser citados (por los tribunales) los dirigentes socialistas que se reúnan con una organización ilegal", en referencia a Batasuna y el anuncio de Patxi López de una próxima reunión con los batasunos. "Deberían pensárselo", advirtió.
 

Ante esta situación, Rajoy indicó que su cambio supondrá que va "a denunciar políticamente esta actitud" y planteará por qué no puede "estar de acuerdo con Zapatero" cuando el presidente "comparezca en el Congreso". "Volveré al ejercicio de la oposición", dijo, porque el presidente "está diciendo a España lo contrario a lo que ha dicho" y "en estas condiciones, no le puedo apoyar de ninguna manera", recalcó Rajoy. El líder del PP dijo que "estamos en la misma situación de antes del alto el fuego" y recordó cómo, desde que el PSOE llegó el poder, el PP fue "marginado y expulsado". "A pesar de eso, pensé que había que dar una oportunidad" al presidente, dijo. "A partir de ahora, si se produce una reunión con Batasuna, quedo liberado del apoyo al Gobierno y estaremos en la situación anterior".  

"Zapatero a mí no me ha engañado"

"Yo no he cambiado mi posición, el que la ha cambiado ha sido Zapatero", explicó Rajoy que recordó que la reunión con Batasuna "supone el reconocimiento como interlocutor de una organización terrorista". Y es que el "acontecimiento por excelencia" para Rajoy desde que se anunció "el alto el fuelgo de ETA" es precisamente la reunión del Partido Socialista con los terroristas. "Es el presidente del Gobierno el que se ha metido en una operación desbaratada, antidemocrática", ha dicho Rajoy. "Se ha puesto en manos de Batasuna", por lo que se "reconoce a Otegi como un interlocutor necesario".
 
A pesar de que reconoció que el Debate "habría sido distinto" si el anuncio de la reunión de Patxi López con Batasuna se hubiera producido antes, dijo que él no se siente engañado "porque no tenía mucha confianza en el presidente del Gobierno". "Ha intentado engañar a 44 millones de españoles porque les dijo primero la paz", afirmó el líder popular para después insistir: "A mí no me ha engañado. El 22 de marzo dije una cosa y la he mantenido. El día del Debate la he mantenido y hoy mi posición es la misma pero es el presidente del Gobierno el que ha roto las reglas del juego". Según Rajoy, "el presidente del Gobierno se ha puesto en manos de ETA y es el inicio del proceso que se marcó por parte de Batasuna en Anoeta".
 
"Del modelo autonómico no queda nada"
 
Rajoy acusó al Gobierno de Zapatero de estar violando, liquidando y vaciando la Constitución de 1978, particularmente el Título VIII que determina la organización territorial del Estado. "El título octavo ya no está en vigor" expresó, y afirmó que del "modelo autonómico" no queda nada. Sobre el tema, dijo que las decisiones gubernamentales tomadas en ese sentido ha sido un "disparate sorprendente". Incluso, dijo, bajo la actual gestión tampoco está en vigor el capítulo primero constitucional que se refiere a la "España indisoluble".
 
Ante ese panorama, el jefe de la oposición recordó el recurso interpuesto por su partido ante el Tribunal Constitucional por el Estatuto catalán. Los jueces constitucionales, dijo, tendrán un desafío y una "responsabilidad ante la historia". Bajo esa premisa, Rajoy descartó que, aunque no está "eludiendo la acción", ejercerá cualquier otra presión ajena a lo que establece la ley y el estado de derecho. "Yo sólo utilizaré los instrumentos que me da la ley", sentenció.
 
Liquidado el Pacto Antiterrorista
 
Cuestionado sobre el Pacto Antiterrorista, el líder del PP afirmó que convocarlo ahora no le "parece lo más razonable". Añadió que no está "dispuesto a escuchar otra cosa que no sea que el Gobierno no se va a reunir con Batasuna" y que, incluso, el pacto fue liquidado por Zapatero desde la no ilegalización del Partido de las Tierras Vascas y consecuentes actuaciones. "Ha sido el Gobierno el que no ha querido entenderse con el Partido Popular porque ha vulnerado las líneas rojas que nosotros marcamos", resumió.
 
Al responder a las llamadas de los oyentes, Rajoy afirmó que en el debate sobre el estado de la Nación, "no he dado ninguna espantada" ni eludió el tema de la negociación con ETA. Recordó que sobre ello su posición siempre ha sido clara: "se produjo un acontecimiento político importante que fue un alto el fuego. El Gobierno pidió el apoyo de las fuerzas políticas. Fui a la Moncloa, dije que no se pagara un costo político y di mi apoyo para que ETA deje de matar. Esas fueron mis líneas pero el Gobierno las ha incumplido".
 
Rajoy destacó que el eje básico de su intervención ante el Congreso de los Diputados fue denunciar la generación de incertidumbre por las decisiones del Gobierno, por el fin de la España constitucional, por el rompimiento del modelo autonómico y por el sectarismo con el que se conducen los miembros del gabinete. Así, enfatizó que desde las administraciones se han tomado decisiones que han irritado a la sociedad lo que ha provocado la convocatoria de manifestaciones. Enseguida, señaló que su partido, el PP, aunque no convoca directa las movilizaciones, sí es el que las llena y las respalda.
 
El 11-M y las "prioridades del debate"
 
En otro momento de la entrevista, Mariano Rajoy también se refirió a las críticas que ha recibido por su discurso del martes. "No me creo infalible", indicó, "es un debate del que no salí como en otros" y "no hay mejor juez que uno mismo", dijo. "Hay opiniones para todos los gustos, pero uno dispone del tiempo que dispone y hay que priorizar", señaló el líder del PP antes de quejarse de que "nunca en la historia se aplicó el reglamento" del Congreso "a rajatabla". Lamentó el poco tiempo del que dispuso, "que según la lógica, debería ser de media hora y no de diez minutos", y calificó de "antológico" el "espectáculo" dado por las interrupciones de Marín.
 
"Si acerté o no acerté, todo es discutible", "ya dije que lo podía haber hecho mejor", insistió el líder popular, pero celebró que su discurso "al menos tenía fondo" y por eso "todo el mundo habla" de sus palabras y no de las de Zapatero. A continuación, Rajoy explicó las razones por las que no habló del 11-M en su intervención. "Yo tengo que elegir lo que son los temas que más preocupan a los españoles", y citó la vivienda, la seguridad o la economía. "Vamos a seguir defendiendo nuestra posición" sobre los atentados, indicó, "pero yo fijo, porque para eso soy el presidente del partido, lo que creo que son las prioridades en el debate". "Actúo con arreglo a lo que creo, no con arreglo a los vientos. Yo tengo un criterio" y "me puedo equivocar".

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