(Libertad Digital) El abogado José Esteban Verdes se ha negado a contestar al portavoz de Izquierda Unida en la comisión cuando, basándose en un listado de llamadas difundido ilegalmente, le ha interrogado sobre el contenido de sus conversaciones con Eduardo Tamayo. Se ha amparado en que no ha sido llamado a la comisión para hablar de temas profesionales, aunque sí ha admitido, en respuesta a las preguntas del portavoz del PSOE, Modesto Nolla, que Eduardo Tamayo le preguntó por algunos aspectos del "derecho parlamentario" poco antes de abandonar la Cámara regional. También se ha protegido con su derecho a la intimidad cuando ha sido preguntado sobre sus llamadas a su mujer, Paloma García Romero, ex viceconsejera de presidencia de la Comunidad y ahora concejala del Ayuntamiento de Madrid.
Pese a esto, el portavoz de IU ha seguido basando su interrogatorio en el cruce de llamadas entre Tamayo, Verdes y García Romero. "Son personales y profesionales", ha repetido insistentemente. A falta de nuevos argumentos, el portavoz de Izquierda Unida ha sido incapaz de avanzar en el interrogatorio, ya que la única supuesta prueba de que dispone es la lista de llamadas de Eduardo Tamayo que el Grupo Socialista de la Asamblea de Madrid filtró sesgada a los medios de comunicación para intentar demostrar que detrás de la espantada de Tamayo y Sáez había una supuesta "trama" político-inmobiliaria. La estrategia seguida ha sido la misma que ya avanzó el PSOE cuando se produjo la crisis, el pasado 10 de junio, y el objetivo de los interrogatorios a Verdes es, según El País , "tratar de demostrar que Verdes fue el nexo de unión entre Tamayo y Romero de Tejada".
Un largo interrogatorio ayuno de argumentos
Pero ante la falta de argumentos de peso, PSOE e Izquierda Unida no han dudado, como ya hicieron en el caso de los constructores Bravo y Vázquez, en retorcer la cuestión para ligar el silencio del abogado Verdes con su culpabilidad. Así lo ha hecho el portavoz del PSOE en la Comisión de Investigación, Modesto Nolla, cuando ha insinuado que la negativa de Verdes a aclarar el contenido de sus llamadas telefónicas con Tamayo se debe a que tiene mucho que ocultar. Con bastante cintura y mucha paciencia, José Esteban Verdes le ha explicado reiteradamente al portavoz socialista que sus llamadas fueron de carácter profesional y que, como lo que le estaba explicando no se adecuaba a la respuesta que él quería oír, por eso ponía en duda la veracidad de su declaración. "Yo no puedo decirle que hablé de algo de lo que no hablé sólo porque usted quiera oírlo", ha dicho Verdes.
Lo que sí ha explicado el abogado es que no es "amigo íntimo" de Tamayo sino que le considera "conocido", que no conoce a la diputada María Teresa Sáez, ni al ex dirigente de Renovadores por la Base, José Luis Balbás, ni a los constructores Francisco Bravo y Francisco Vázquez. Tampoco Tamayo le ha hablado de ellos, ha matizado. Con respecto a los constructores Bravo y Vázquez, el portavoz del PSOE ha intentado poner en dificultades a Verdes al hablarle de la fusión de una empresa para la que él trabajo y otra en la que, al parecer, los constructores son sus propietarios, total o parcialmente. Sin embargo, Verdes le ha aclarado que dicha fusión se produjo mucho después de que él dejara de trabajar en esa sociedad y que, si los datos del Registro que Nolla tiene en su poder dicen lo contrario, será porque no están actualizados.
Controversia por la reserva de una suite
Durante el interrogatorio, Modesto Nolla sacó el tema de la reserva de una suite en un lujoso hotel de Madrid. El portavoz socialista aludió a lo publicado en la prensa, afirmando que el constructor Francisco Vázquez era quien reservó a Verdes y a su mujer, Paloma García Romero, la suite en un lujoso hotel madrileño para pasar su noche de bodas. El abogado José Esteban Verdes aseguró que se enteró de este asunto por la prensa y negó conocer tanto a Vázquez como a su sobrino, Francisco Bravo. Según explicó Verdes, Fernando Bastarreche, ex director general del programa Madrid Excelente de la Comunidad de Madrid, se ofreció a hacerle la reserva de la habitación, "un favor" que en ningún momento, dijo, suponía la gratuidad de la suite.
De hecho, Verdes detalló que, por la mañana, cuando iban a abandonar el hotel él y su mujer y pidió la cuenta, "me dijo Paloma (García Romero): pagas tú o pago yo, y le contesté que como la reserva estaba a su nombre, que pagara a ella". Afirmó que tras enterarse de que Bastarreche, con quien reconoció mantener "cierta amistad", no había sido el responsable de la reserva, sino el constructor Francisco Vázquez, el ex director general de Madrid Excelente le pidió "todo tipo de disculpas" y estimó que lo hizo "sin mala intención" y "sin darse cuenta de que nos había metido en un verdadero problema".
Renuncia a la indemnización
Por otro lado, el abogado ha aclarado, en declaraciones a Telemadrid antes de comparecer ante la Comisión de Investigación, que no solicitará a la Cámara la indemnización por verse obligado a alterar un viaje que tenía programado para estos días. Según José Esteban Verdes, el viaje que tenía previsto hacer no costaba 90.000 euros ni consistía en una gira por el continente africano. Según dijo, el viaje le ha costado 10.000 euros y la empresa con la que lo contrató, El Corte Inglés , le ha puesto todas las facilidades para que pudiera cambiar las fechas sin apenas penalizarle. Verdes explicó también que no solicitará ninguna indemnización a la Cámara, a pesar del retraso de las comparecencias, porque "la tendrían que pagar los madrileños", que "no tienen culpa" de lo que está sucediendo.
Si esta compensación repercutiera en los propios diputados, comentó, “pediría daños y perjuicios”, ya que, según puso de manifiesto, él estaba citado a declarar el pasado 29 de julio y, al retrasarse su interrogatorio, dio todo tipo de facilidades a la Comisión para poder prestar declaración otros días que no coincidieran con sus vacaciones, aunque finalmente tuvo que pedirle a su agencia de viajes que le cambiaran las fechas y resolver así el problema.
Pese a esto, el portavoz de IU ha seguido basando su interrogatorio en el cruce de llamadas entre Tamayo, Verdes y García Romero. "Son personales y profesionales", ha repetido insistentemente. A falta de nuevos argumentos, el portavoz de Izquierda Unida ha sido incapaz de avanzar en el interrogatorio, ya que la única supuesta prueba de que dispone es la lista de llamadas de Eduardo Tamayo que el Grupo Socialista de la Asamblea de Madrid filtró sesgada a los medios de comunicación para intentar demostrar que detrás de la espantada de Tamayo y Sáez había una supuesta "trama" político-inmobiliaria. La estrategia seguida ha sido la misma que ya avanzó el PSOE cuando se produjo la crisis, el pasado 10 de junio, y el objetivo de los interrogatorios a Verdes es, según El País , "tratar de demostrar que Verdes fue el nexo de unión entre Tamayo y Romero de Tejada".
Un largo interrogatorio ayuno de argumentos
Pero ante la falta de argumentos de peso, PSOE e Izquierda Unida no han dudado, como ya hicieron en el caso de los constructores Bravo y Vázquez, en retorcer la cuestión para ligar el silencio del abogado Verdes con su culpabilidad. Así lo ha hecho el portavoz del PSOE en la Comisión de Investigación, Modesto Nolla, cuando ha insinuado que la negativa de Verdes a aclarar el contenido de sus llamadas telefónicas con Tamayo se debe a que tiene mucho que ocultar. Con bastante cintura y mucha paciencia, José Esteban Verdes le ha explicado reiteradamente al portavoz socialista que sus llamadas fueron de carácter profesional y que, como lo que le estaba explicando no se adecuaba a la respuesta que él quería oír, por eso ponía en duda la veracidad de su declaración. "Yo no puedo decirle que hablé de algo de lo que no hablé sólo porque usted quiera oírlo", ha dicho Verdes.
Lo que sí ha explicado el abogado es que no es "amigo íntimo" de Tamayo sino que le considera "conocido", que no conoce a la diputada María Teresa Sáez, ni al ex dirigente de Renovadores por la Base, José Luis Balbás, ni a los constructores Francisco Bravo y Francisco Vázquez. Tampoco Tamayo le ha hablado de ellos, ha matizado. Con respecto a los constructores Bravo y Vázquez, el portavoz del PSOE ha intentado poner en dificultades a Verdes al hablarle de la fusión de una empresa para la que él trabajo y otra en la que, al parecer, los constructores son sus propietarios, total o parcialmente. Sin embargo, Verdes le ha aclarado que dicha fusión se produjo mucho después de que él dejara de trabajar en esa sociedad y que, si los datos del Registro que Nolla tiene en su poder dicen lo contrario, será porque no están actualizados.
Controversia por la reserva de una suite
Durante el interrogatorio, Modesto Nolla sacó el tema de la reserva de una suite en un lujoso hotel de Madrid. El portavoz socialista aludió a lo publicado en la prensa, afirmando que el constructor Francisco Vázquez era quien reservó a Verdes y a su mujer, Paloma García Romero, la suite en un lujoso hotel madrileño para pasar su noche de bodas. El abogado José Esteban Verdes aseguró que se enteró de este asunto por la prensa y negó conocer tanto a Vázquez como a su sobrino, Francisco Bravo. Según explicó Verdes, Fernando Bastarreche, ex director general del programa Madrid Excelente de la Comunidad de Madrid, se ofreció a hacerle la reserva de la habitación, "un favor" que en ningún momento, dijo, suponía la gratuidad de la suite.
De hecho, Verdes detalló que, por la mañana, cuando iban a abandonar el hotel él y su mujer y pidió la cuenta, "me dijo Paloma (García Romero): pagas tú o pago yo, y le contesté que como la reserva estaba a su nombre, que pagara a ella". Afirmó que tras enterarse de que Bastarreche, con quien reconoció mantener "cierta amistad", no había sido el responsable de la reserva, sino el constructor Francisco Vázquez, el ex director general de Madrid Excelente le pidió "todo tipo de disculpas" y estimó que lo hizo "sin mala intención" y "sin darse cuenta de que nos había metido en un verdadero problema".
Renuncia a la indemnización
Por otro lado, el abogado ha aclarado, en declaraciones a Telemadrid antes de comparecer ante la Comisión de Investigación, que no solicitará a la Cámara la indemnización por verse obligado a alterar un viaje que tenía programado para estos días. Según José Esteban Verdes, el viaje que tenía previsto hacer no costaba 90.000 euros ni consistía en una gira por el continente africano. Según dijo, el viaje le ha costado 10.000 euros y la empresa con la que lo contrató, El Corte Inglés , le ha puesto todas las facilidades para que pudiera cambiar las fechas sin apenas penalizarle. Verdes explicó también que no solicitará ninguna indemnización a la Cámara, a pesar del retraso de las comparecencias, porque "la tendrían que pagar los madrileños", que "no tienen culpa" de lo que está sucediendo.
Si esta compensación repercutiera en los propios diputados, comentó, “pediría daños y perjuicios”, ya que, según puso de manifiesto, él estaba citado a declarar el pasado 29 de julio y, al retrasarse su interrogatorio, dio todo tipo de facilidades a la Comisión para poder prestar declaración otros días que no coincidieran con sus vacaciones, aunque finalmente tuvo que pedirle a su agencia de viajes que le cambiaran las fechas y resolver así el problema.