"Rubalcaba estuvo muy nervioso en el Parlamento", comenzaba Esteban González Pons a responder a la pregunta de Libertad Digital. "Llegó incluso a sugerir algo asqueroso y es que el final de ETA supone que se lavan todas las culpas de los que pudieron haber traicionado a la policía con ETA. El final de ETA no lava ninguna culpa, el final de ETA es el final de ETA. Y si alguien por el camino traicionó a la Policía con ETA debe pagar". "Es asqueroso", sentenciaba.
Una "traición" ha considerado Pons, "a los policías muertos y a las Fuerzas de Seguridad del Estado que se juegan la vida en la lucha contra ETA". Considerado el vicesecretario de comunicación del PP que el ministro del Interior quiere evadir responsabilidades.
Pero, según Pons, tanto Rubalcaba como Ramón Jaúregui y Francisco Caamaño, los ministros de Presidencia y Justicia, dejaron ver algo más en su intervención el Congreso. "Que el chivatazo puede que sea verdad, pero que no son responsables ni el secretario de estado ni el ministro. O sea, que van a pagar los polis por los políticos... los que se juegan la vida en el País Vasco que son los Policías son los que se van a comer el marrón del secretario de estado y del ministro del Interior".
"¿De verdad alguien piensa que un policía traiciona a sus compañeros con los terroristas si no tiene la orden de un político?", decía apuntando al que ellos mismos han calificado como la "X del Faisán": Rubalcaba.
Pero el discurso se hunde cuando se le preguntaba al Portavoz del PP por la actitud del Gobierno con Sortu, la nueva Batasuna, y si se fían, o no, del Ejecutivo. "Nosotros nos fiamos del Gobierno en lo que respecta a la lucha antiterrorista. Y precisamente por eso estamos convencidos de que el Gobierno va a hacer todo lo posible porque Sortu no sea legal". Aseguraba Pons que están "completamente convencidos de que el Gobierno va a hacer todo lo posible porque Batasuna no sea legal".
Desde la dirección niegan a LD que esta estrategia sea"bipolar". "Cada uno juega su papel y los interlocutores que hay en el Pacto Antiterrorista no son los mismos que los que le preguntan a Rubalcaba en la Sesión de Control", se limitan a decir.
¿Qué piensa realmente el PP?
Los populares están cuidando mucho su mensaje de cara a la galería. Pero cosa muy distinta es lo que opinan los miembros de la dirección y responsables de la política antiterrorista. Aunque lo digan sottovoce a Libertad Digital.
"El Gobierno está preparando el terreno. Su discurso, ambigüo y satisfecho, demuestra que con un disfraz más sofisticado, les permitirán ir a las elecciones". Dicen que Sortu es un "disfraz demasiado burdo", que "ni siquiera el Gobierno lo va a permitir". Pero habrá "otras fórmulas" con la que, a su juicio, van a conseguir estar. Reclaman del Ejecutivo que no deje la pelota en el campo de los jueces porque es, en primera instancia, al Gobierno a quien lo toca actuar recabando pruebas de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. "La responsabilidad, en primera instancia, es del Gobierno. Que no se me escude en la Fiscalía o el Supremo", dice un portavoz de Interior del PP.
Sobre el recurso de la Fiscalía General y la Abogacía del Estado no tienen dudas de que "habrá recurso, es imposible que no lo haya". Pero el problema no es el qué sino el cómo, es decir, qué tipo de recurso presentarán ante la sala 61 del Gobierno. Y teniendo en cuenta que uno de los responsables es Conde-Pumpido... les sobran argumentos. "Yo no me fío de Pumpido. Es un fiscal al servicio del proyecto de Zapatero y todos recordamos cuál fue su papel en el mal llamado proceso de paz".
Pero ¿qué pasará si finalmente Batasuna, ETA, logra entrar en las elecciones? Pues que habrá una ruptura del Pacto Antiterrorista con el Gobierno. De forma oficial lo confirmaba hoy Ana Mato, la vicesecretaria de organización del PP. Pero las fuentes consultadas por este periódico apuntan a que no será iniciativa del PP, sino del Gobierno, porque le va a interesar una ruptura con el PP. Van a preferir rentabilizarlo en solitario, utilizarán una maniobra para tratar de echarnos del pacto". Lo dicen porque saben que "PSOE y Gobierno siempre utilizan la política antiterrorista con cálculo electoral".