(Libertad Digital) El presidente del Partido Popular de Cataluña, Josep Piqué, ha advertido al líder de CiU, Artur Mas, que aunque hoy no quiera pactar con su partido "hay que tener en cuenta la realidad" y no confundirla "con los deseos". "Es una obviedad", ha añadido que si el tripartito no consigue la mayoría absoluta tras las elecciones sí la suman CiU y PP, por lo que "la noche del 1 de noviembre cada uno deberá asumir sus responsabilidades" y construir las alianzas necesarias para no repetir "la nefasta experiencia" del tripartito.
En declaraciones a Onda Cero, Piqué ha asegurado también que convocar los comicios en un día festivo entre semana es "el colofón a una legislatura esperpéntica". Sobre la alternativa que planteó el PSC, la de realizar las elecciones en día laborable, ha agregado que es "una nueva muestra" de que los socialistas "siempre anteponen los intereses de partido a los intereses generales" y de que "son propensos al gasto público y a perjudicar la economía". Al referirse a las posibilidades del Partido Popular, ha dicho que alcanzará un "excelente resultado" en los comicios. "Las cosas van a ir bien", ha aventurado.
Sobre el presidente catalán, Pasqual Maragall, ha dicho que tanto la fecha de las elecciones como la forma en que fue anunciada son "dignos de un presidente conocido por sus maragalladas". Sin embargo, el PPC se sumó al homenaje que todos los grupos políticos de Cataluña realizaron a Maragall.
Pero no es la primera vez que Josep Piqué apuesta por una alianza con CiU. El pasado mes de junio el líder de los populares catalanes aseguraba que si el Estatuto era aprobado la mejor fórmula de gobierno para Cataluña sería un pacto con los convergentes, ya que su partido evitaría la aplicación de los aspectos "más intervensionistas" del texto. Incluso no dudó en recordar lo que llamó "buenos resultados de la colaboración" entre CiU y PP en el pasado.