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Piqué pide a Maragall que dimita por el "ridículo" que ha "deteriorado como nunca" la imagen de Cataluña

El presidente del PP catalán, Josep Piqué, pidió este miércoles directamente al presidente Pascual Maragall que "dimita" por el "ridículo" de un gobierno al que responsabilizó de haber "deteriorado" el "prestigio y la imagen de Cataluña, de sus instituciones de autogobierno y de su presidente" en el resto de España como "nunca" antes. Ante las risas escépticas del propio Maragall, Piqué utilizó el atril del hemiciclo para reclamarle: "dimita", y "pongan a votación de esta Cámara un nuevo presidente, que todos saldríamos ganando".

El presidente del PP catalán, Josep Piqué, pidió este miércoles directamente al presidente Pascual Maragall que "dimita" por el "ridículo" de un gobierno al que responsabilizó de haber "deteriorado" el "prestigio y la imagen de Cataluña, de sus instituciones de autogobierno y de su presidente" en el resto de España como "nunca" antes. Ante las risas escépticas del propio Maragall, Piqué utilizó el atril del hemiciclo para reclamarle: "dimita", y "pongan a votación de esta Cámara un nuevo presidente, que todos saldríamos ganando".
L D (Europa Press) Piqué invitó al tripartito catalán a escoger un nuevo presidente de la Generalitat, convencido de que ello "no rompería la estabilidad del tripartito" y de que entre los tres miembros del Gobierno "hay personas que estarían encantadas de sucederlo, que están convencidas de que lo harían mejor y no abrirían una crisis como la que usted ha abierto". Así, sólo reconoció a Maragall "el mérito de haber aumentado" en estos días "la cohesión del tripartito" ya que hoy "todos los grupos del gobierno están en contra de usted".
 
La respuesta de Maragall fue la más breve de sus réplicas a presidentes de grupo, puesto que se limitó a dejar claro su enojo por un discurso de Piqué que consideró "que rallaba el insulto" y que estaba elaborado a base de "perdigonadas" al presidente. Maragall interpretó la intervención de Piqué como fruto "de algún mal humor que le viene de algún otro tema que desconozco" y reconoció haber oído un discurso más duro "de lo que hubiera esperado" y que criticó como "desestructurado" y formado sólo por "cuatro cosas mal dichas".
 
"La perdigonada no es propia de un jefe de grupo" del Parlament, afirmó Maragall, que aseguró sentirse "desorientado" sobre "lo que realmente quiere" el líder de los populares catalanes para "la orientación de Catalunya y de su política de oposición".
 
Piqué aseguró que su discurso tenía "un tono de profunda preocupación de país" al pensar que "las instituciones catalanas hacen el ridículo" y aseguró que "hay muchos ciudadanos que sienten vergüenza de lo que están sucediendo, algo que se refleja hoy en absolutamente todos los medios de comunicación". Así, pidió a Maragall un "ejercicio de autocrítica" y que "baje de la luna".
 
Para Piqué, "ayer vimos a un presidente cansado y aburrido, que ha malgastado su caudal político y que ha sido acusado en las últimas horas por su propio gobierno de inorpotuno, desleal y de hacer alcaldadas, un presidente sin gobierno, que no puede hacer balance de su la gestión de su Ejecutivo porque han concentrado los últimos dos años en un solo tema", el Estatuto.
 

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