
L D (EFE) El presidente de La Rioja, Pedro Sanz Alonso, inauguró la pasada noche el ciclo de cenas-coloquio del Centro Riojano en Madrid, se refirió al proceso de reforma de los Estatutos de Autonomía y, en concreto, al de Cataluña, cuyo acuerdo entre el Gobierno central y CiU cree que rompe los criterios de soberanía, consenso, igualdad y solidaridad.
Sanz indicó que "La Rioja está orgullosa de su historia, de marcar contraste y diferencias con su identidad, con su personalidad, con sus raíces, con su cultura y con todo lo que aportamos al conjunto de los españoles", pero "no vamos a permitir que se produzcan situaciones en las que los riojanos seamos ciudadanos de segunda frente a otros que quieren ser de primera". Sanz Alonso aludió a que ahora se ha roto el consenso que alcanzaron los dos grandes partidos, PP y PSOE, en el pacto autonómico que permitió, entre 1996 y 2004, la igualdad competencial entre las comunidades, con independencia de que accedieron a la autonomía por los artículos 143 o 151 de la Constitución.
Sin embargo ahora, con la reforma del Estatuto catalán, se ha creado "inseguridad" e "incertidumbre" y se ha roto ese consenso en "un momento determinado, no por un partido político, sino por un presidente concreto de un partido político, que es muy distinto", ya que el PSOE, con Felipe González como presidente del Ejecutivo, firmó ese pacto autonómico con el PP. "Ahora, por situaciones de debilidad, de circunstancias, de conveniencia, se produce un caso curioso: que un presidente del Gobierno -José Luis Rodríguez Zapatero-, con un partido nacionalista en la oposición minoritaria -CiU-, plantea la ruptura del consenso".
El presidente cree que también "puede plantear privilegios y desigualdades, rompe la solidaridad como elemento de cohesión y vertebración de España y contribuye a lo que son las comunidades de primera y de segunda", lo que no debe producirse. Precisó que "todo aquel que quiera marcar diferencias de unas comunidades con otras estará rompiendo el principio básico de la igualdad de todos los españoles ante la ley, estará intentando buscar privilegios y si alguien, encima, quiere plantear la soberanía particular de un territorio respecto al resto, estará yendo en contra de lo que marca la Constitución, que dice que la soberanía se encarna en todos los españoles".
El presidente del Gobierno riojano entendió que la reforma de los Estatutos "no es una subasta ni una carrera", sino que "hay que tener una visión mucho más integradora e institucional de lo que estamos haciendo" porque "si cada comunidad empieza a ir por su cuenta, estaremos rompiendo el Estado, la convivencia y la vertebración de España". Puntualizó, respecto a la parte de financiación plasmada en el acuerdo alcanzado sobre la reforma estatutaria de Cataluña, que "algunos pueden estar pretendiendo que entremos al análisis de las pelas, es lo que quieren los catalanes, pero hay que entrar más en el procedimiento y luego entraremos en el contenido".
Un proceso que evolucionó de manera satisfactoria gracias "al consenso entre los dos grandes partidos", el PP y el PSOE, un pacto que "garantizaba ese desarrollo", aunque en un principio se comenta con diferencias entre unas comunidades y otras.. Una postura "que daba tranquilidad, seguridad y confianza a todos los ciudadanos", de la misma manera que la igualdad, ya que "todos vivan donde vivan tienen que tener las mismas oportunidades y derechos". Así como la solidaridad, como elemento fundamental de cohesión y vertebración de todas las regiones, conceptos que "chocan con lo que puede ser privilegios, desigualdades o comunidades de primera y segunda".