L D (EFE) A través de un comunicado, el dirigente de los socialistas vizcaínos aseguró que Ibarretxe no ha gobernado para el conjunto de los ciudadanos vascos y le acusó de haber fomentado "la crispación y la división social, forzando a los vascos a enfrentarnos entre nosotros".
Negó que el denominado Plan Ibarretxe suponga una mera reforma estatutaria y afirmó que es "un proyecto independentista" en el que el apoyo de los parlamentarios de la ilegalizada Batasuna "evidencia que quien tiene la clave de este país es ETA y su entorno", mientras que "los nacionalistas del PNV son comparsas que se mueven al son que tocan los violentos".
Pastor apuntó en su comunicado que el problema planteado es "muy serio y preocupante" ya que "el PNV pretende saltarse la Ley y hacer creer a los vascos que no pasa nada, que todo es negociable". "Los socialistas -recalcó Pastor- queremos decirle al PNV que no mienta ni engañe, la democracia y la Ley no se negocian, su Plan es ilegal y, por tanto, no hay negociación que valga. El Estado de Derecho y la política pondrán a cada cual en su sitio, y el gobierno garantizará la normalidad democrática".
El dirigente socialista subrayó que los vascos autonomistas "no nos sentimos en absoluto representados" por el proyecto de Ibarretxe, que consideró "una aventura a la que no estamos dispuestos a jugar, porque lo que nos jugamos es muy serio, es la convivencia y la libertad de todos los vascos". Recordó que dentro de unos meses se celebrarán elecciones y "los ciudadanos vascos tendremos la oportunidad de decirle a Ibarretxe y a los violentos que no nos gusta lo que están haciendo; que queremos vivir en paz y con estabilidad, con progreso y bienestar y sin riesgos de rupturas sin sentido".
Por contra defendió la propuesta de Reforma Estatutaria patrocinada por su partido, "que profundiza el autogobierno vasco, que respeta las leyes, y que además cuenta con el aval de todo el socialismo español para salir adelante". "Nosotros -agregó- no queremos romper con nadie, ni enfrentarnos artificialmente con Madrid, queremos una Euskadi construida entre todos y trabajando junto con el resto de los españoles por una sociedad mejor".
Negó que el denominado Plan Ibarretxe suponga una mera reforma estatutaria y afirmó que es "un proyecto independentista" en el que el apoyo de los parlamentarios de la ilegalizada Batasuna "evidencia que quien tiene la clave de este país es ETA y su entorno", mientras que "los nacionalistas del PNV son comparsas que se mueven al son que tocan los violentos".
Pastor apuntó en su comunicado que el problema planteado es "muy serio y preocupante" ya que "el PNV pretende saltarse la Ley y hacer creer a los vascos que no pasa nada, que todo es negociable". "Los socialistas -recalcó Pastor- queremos decirle al PNV que no mienta ni engañe, la democracia y la Ley no se negocian, su Plan es ilegal y, por tanto, no hay negociación que valga. El Estado de Derecho y la política pondrán a cada cual en su sitio, y el gobierno garantizará la normalidad democrática".
El dirigente socialista subrayó que los vascos autonomistas "no nos sentimos en absoluto representados" por el proyecto de Ibarretxe, que consideró "una aventura a la que no estamos dispuestos a jugar, porque lo que nos jugamos es muy serio, es la convivencia y la libertad de todos los vascos". Recordó que dentro de unos meses se celebrarán elecciones y "los ciudadanos vascos tendremos la oportunidad de decirle a Ibarretxe y a los violentos que no nos gusta lo que están haciendo; que queremos vivir en paz y con estabilidad, con progreso y bienestar y sin riesgos de rupturas sin sentido".
Por contra defendió la propuesta de Reforma Estatutaria patrocinada por su partido, "que profundiza el autogobierno vasco, que respeta las leyes, y que además cuenta con el aval de todo el socialismo español para salir adelante". "Nosotros -agregó- no queremos romper con nadie, ni enfrentarnos artificialmente con Madrid, queremos una Euskadi construida entre todos y trabajando junto con el resto de los españoles por una sociedad mejor".