Como la semana pasada, el vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, había traspasado la preguntas sobre los ERES en Andalucía a su compañero de Gobierno Valeriano Gómez, el titular de Trabajo. La comunicación gubernamental les llegaba a los populares esta semana pero esta misma mañana la pregunta ha quedado aplazada por parte del Gobierno. "Es la segunda semana que se produce una espantada del señor Chaves, ya no tiene acostumbrados", decía en los pasillos el popular Juan José Matarí, el titular de la pregunta.
"Tenemos que decir que ha intentado esconderse detrás del ministro de Trabajo cuando sabía que está enfermo, porque ya esta tarde en el Senado ha pasado algo parecido". En efecto, el ministro de Trabajo se ausentará por enfermedad. Para el diputado popular, la situación demuestra "que Chaves se esconde de los muchos abusos que ha cometido en Andalucía".
La decisión de "incomparecencia" del Gobierno se suma al "veto del PSOE" esta mañana a la comparecencia del Fiscal General del Estado para dar cuenta de la trama de los ERES de Andalucía. Una "no actuación" de la Fiscalía que Matarí califica de "auténtica vergüenza". Los populares aseguran que este caso, "el mayor escándalo de corrupción que se ha producido en Andalucía en todos estos años de democracia", se va a ir conociendo en las próximas semanas "se ponga como se ponga el señor Chaves". Y aseguran que en el corto plazo, "van a ir desfilando muchos socialistas. Van a salir muchas más cosas".
Cosas que "le van hacer avergonzarse y marcharse del Gobierno", dice Matarí sobre el vicepresidente tercero, que "tiene mucho que explicar, va a a tenerlo que explicar y se pone en la situación de que sobra en el Gobierno de España. Si no es capaz de venir al Congreso a dar explicaciones y se esconde es porque seguramente tiene mucho que esconder".
Esa pregunta no se podrá contestar hasta el día 9 de marzo, ya que la próxima semana es la primera sin pleno del mes. Juan José Matarí critica que se trata de "un escándalo institucional de primera magnitud, una falta de respeto al Parlamento" y que "no se pueden consentir estas continuas afrentas al Parlamento".