(Libertad Digital) En una entrevista en El Correo, Miguel Ángel Moratinos hace un balance excelente de la política exterior española en 2007. Para el ministro, 2007 ha estado "lleno de buenas noticias" y va a "concluir incluso con mejores". De Chad dice que "se armó un gran barullo y nerviosismo" pero que "al final los españoles están en territorio nacional". De Marruecos, celebra que tras la visita a Ceuta y Melilla no se produjo "una convulsión imposible de resolver".
En cuanto al incidente que hace una semana protagonizó Hugo Chávez en la clausura de la Cumbre Iberoamericana, afirma que "no tendrá en absoluto" consecuencias en las buenas relaciones con Latinoamérica. Según el ministro, allí hay un "marco institucional" además de "empresas e intereses económicos". "Se ha creado un entramado muy fuerte de relaciones que obliga, pese a algún desencuentro, a reencontrarnos", dice.
"Hay que esperar"
Moratinos confía en que pese a los insultos de Chávez "encontraremos una vía de reencuentro" lo más "rápidamente posible". Se basa en los lazos "tan profundos" con Venezuela y en los "intereses comunes". En cuanto al Rey, dice que su imagen en Iberoamérica "ha salido reforzada". Según dice, "había una complicidad, unidad, convergencia" en la actuación del monarca y del Ejecutivo.
Respecto a la respuesta que debería darse a Chávez ante sus reiterados ataques, Moratinos indica que "hay que esperar" y "hay que evitar toda esa serie de declaraciones y contradeclaraciones". "Cuanto menos hablemos del incidente con Hugo Chávez y de la situación, mejor para retomar la confianza y recuperar la relación". El periodista le recuerda la insistencia de Chávez en arremeter contra el Rey. "Creo que en las últimas horas no ha dicho nada", se limita a contestar el ministro.