L D (Agencias) El candidato del PSC, José Montilla, reprochó este domingo a Artur Mas que "se piensan que pueden tener el monopolio de la representación de Cataluña, también en Madrid". Montilla participó este mediodía en una paellada popular en el CEIP Elvira Cuyàs que, al parecer, desbordó a los organizadores y que dejó a los periodistas, perdidos de nuevo por la localidad en el autobús de campaña, sin comida y con bocadillos a repartir como único consuelo.
En su intervención, Montilla recordó a Mas que el PSC tiene 21 diputados en Madrid frente a los 10 de la federación nacionalista y le preguntó "por qué no llevó al notario" a su reunión secreta con el líder de ERC, Josep Lluís Carod-Rovira, o a Doñana "cuando fue a ver a dirigentes del PP". El candidato del PSC fue más allá a la hora de reivindicar el papel decisivo de los socialistas catalanes frente a CiU y recordó que "cuando CiU se ha tenido que mojar, siempre se ha mojado por la derecha" y "votó dos veces a Aznar como presidente incluso cuando tenía mayoría absoluta", lo que evidencia, según Montilla, "la afinidad de las propuestas y el proyecto" de CiU y PP.
También recordó que en 2004, la federación nacionalista no votó a Zapatero y que sólo apoyó los presupuestos generales del Estado para no quedarse solo con el PP. "CiU es prescindible, poco relevante, también en Madrid, y ellos lo saben", sentenció, pese al "especial interés en aparecer como partido responsable con capacidad de interlocución en Madrid". Montilla acusó a Mas de considerar el Gobierno de Pasqual Maragall "una anomalía histórica que hay que corregir para que vuelvan a mandar los que tienen la propiedad del país" y auguró que el día 1 "se llevarán una sorpresa y continuarán en la oposición".
Así, el presidenciable socialista recordó que "sólo" él y Artur Mas tienen opciones de acceder a la presidencia y se mostró convencido de la victoria y de llegar "gobernar siendo fieles a nuestras propuestas" y "sin necesidad de pasar por el notario". Para lograrlo, pidió a los asistentes que en los días de campaña logren convencer a sus convecinos de que tienen que votar al PSC, porque somos "gente de palabra y no de palabrería", como Artur Mas.
Piqué pide el voto moderado de CiU ante su "exceso de cinismo político"
El candidato del PP a la Presidencia a la Generalidad, Josep Piqué, pidió este domingo el voto moderado de CiU ante el "exceso de cinismo político" y "falta de convicción" de la federación nacionalista. También aseguró que ve a Artur Mas "nervioso" y que "este tacticismo brutal", de "sólo pensar en propuestas inmediatas y a corto plazo", pero "sin ningún proyecto político" le "pasará factura". En un mitin que celebró en Roses (Girona) ante unos 70 militantes y simpatizantes, Piqué aseguró que CiU "ha cambiado mucho", porque "en otras épocas defendía proyectos de país", aunque "no siempre fueran acertados". No obstante, "ahora no tiene proyectos de país, sino que busca propuestas inmediatas, para salir en los titulares de prensa".
A su entender, CiU demuestra "una falta de convicción y un exceso de cinismo político absolutamente extraordinarios". En el caso del Estatut, "dicen que son los únicos que salen del Parlament diciendo que son los únicos que defienden las convicciones y los principios irrenunciables", señaló. Sin embargo, "se van una noche a la Moncloa y después de dos paquetes de Winston deciden hacer lo contrario, traicionado al presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, a la propia Generalitat y al Parlament", y llegan a "traicionar sus propias palabras", según Piqué, quien advirtió de que CiU "no es de fiar".
"Su gran aportación en la campaña es su propuesta sobre el carné por puntos a los inmigrantes", advirtió Piqué, quien censuró que para abordar el fenómeno de la inmigración "todo se reduzca a saber el Virolai o qué es la Pascua Granada" y calificó el compromiso de CiU de un "gran disparate". Para abordar este fenómeno, los ayuntamientos "no pueden empadronar al primero que pase por ahí", en relación a 'sin papeles', porque "a la semana tienen su tarjeta sanitaria". "Yo no estoy en contra de los derechos humanos, sino al contrario, porque dar permisos de reagrupación familiar para que vivan 30 inmigrantes en un piso no es apoyar los derechos más elementales", señaló.
También criticó a CiU por "haber distribuido el polémico DVD y aprovechar para criticar al tripartito", pero "todo esto lo podrían haber hecho antes", porque durante la legislatura "se han dedicado a pastelear con el debate del Estatut y a taparse las vergüenzas con el PSC con el 3% y el hundimiento del Carmel". En este sentido, aseguró que el PP "ha sido la auténtica oposición" del Gobierno catalán en el Parlament y advirtió de que CiU "puede ir por la mañana al notario y hacer un testamento y volver por la tarde y cambiarlo", en alusión al compromiso escrito de Artur Mas de no llegar a pactar con el PP, lo que es una muestra de "arrogancia y soberbia política".