(Libertad Digital) En declaraciones al programa Hora 25 de la Cadena SER del miércoles por la noche, Carles Bonet dejó claro que ese acuerdo por el que Carod volvería a la Generalidad se adoptó "de forma implícita", es decir que, como explicó "en ciertos ambientes es mejor la palabra que lo acordado por escrito".
No se trataba de una declaración casual o exenta de intención. El propio Bonet, al dar los detalles de aquel pacto enfatizó: "Y esto lo digo porque luego todo el mundo dice mentiras". La operación, siempre según la versión del vicesecretario general de ERC, consistía en retornar a Carod al Gobierno de Cataluña, después de las elecciones generales, en concreto, "antes de las elecciones al Parlamento Europeo" que se celebrarán en junio. Por tanto, en primavera acabaría la farsa con la que, tanto desde el PSOE como desde el PSC y ERC, se dio por zanjada la crisis.
Ahora esa reunión que expuso Bonet también se niega. Y lo hace uno de los asistentes, el primer secretario del PSC, José Montilla. En su argumentación utiliza los mismos términos que su socio de Gobierno Bonet. No hubo tal pacto "y el que diga lo contrario miente". Su versión, expresada horas después en un acto electoral en Mataró, sostiene que "la salida de Carod Rovira del gobierno catalán fue por todas las razones que ya se conocen y no hubo ningún acuerdo para su retorno". La contradicción ha quedado servida pero no explicada. Lo cierto es que la salida a la primera crisis –la reunión de Carod con la cúpula de ETA– contentó a los tres partidos implicados, PSC, PSOE y ERC, y ahora está en entredicho.
Tras conocer el pacto secreto Maragall-Carod admitido por Bonet, el portavoz del Gobierno, Eduardo Zaplana, ha mostrado en "La Mañana" de la Cadena COPE su indignación: "Era todo mentira, era una artimaña". Además, Zaplana calificó de "muy raro" todo lo que está sucediendo en torno al Gobierno catalán y recordó que el PSOE "sigue sin romper" con el partido que ha pactado con ETA. Zaplana dijo que "todo esto es muy raro" y "no quiero decir algo que no sé". Sin embargo, sugirió que el presidente de la Generalidad puede ocultar algo. "Yo no sé si es que Maragall sabe más o tuvo conocimiento de algo anteriormente", añadió el ministro. Por su parte, el vicepresidente Javier Arenas señaló que "se nos ha engañado porque se nos dijo que no volvería a ser conseller" y dijo que "si fuera así", supondría que el presidente de la Generalidad "ha intentado tomar el pelo a toda la sociedad española".
Aunque desde el Gobierno no se han concretado las sospechas, parece que la intención de ERC de filtrar ahora un pacto para retornar a Carod podría servir a esta formación para volver a cerrar en falso la crisis, negando cualquier posibilidad de que el secretario general de ERC ocupe un cargo en la Generalidad.
Otro de los presentes en esa aquella reunión, Joan Puigcercós, se ha referido a la posible salida de Carod de ERC para salvar el acuerdo de gobierno con el PSC. Explicó que en Esquerra tomarán una decisión pensando "en el gobierno de Cataluña, en el bien de Cataluña y, en último término, en el partido". El dirigente independentista ha asegurado que la voluntad de su partido es que el "Govern continúe", una voluntad que comparte con el PSC, tal como ha señalado el secretario general de los socialistas catalanes, José Montilla, que ha aseverado que "el tripartito continuará".