Ya hace años que me sucede algo extraño.
Cuando oigo el término "víctimas del terrorismo" me sabe a poco. Mejor dicho no me sabe a nada. No consigo, por mucho que lo intento, identificarme con las "víctimas".
Pero lo hago perfectamente con los Héroes.
En efecto, el inspector jefe Eduardo Puelles ha sido, y será en nuestra memoria, un Héroe.
No una víctima. Un Héroe que murió en la lucha contra un enemigo despiadado al que tantas víctimas causó. Un Héroe.
Me gustaría haber sido el hermano del Héroe y haber dicho lo que él ha dicho.
Josu Puelles, menudo estómago tienes . . .