(Libertad Digital) En una larga entrevista a Jaime Mayor Oreja que publica el semanario ÉPOCA en su edición de este viernes, el presidente del Grupo Parlamentario Popular en la Cámara del País Vasco, Jaime Mayor Oreja, demuestra que sigue en la carrera sucesoria y habla, fundamentalmente, de asuntos de política nacional vistos desde la perspectiva del modelo de Estado que defienden el PP y el PSOE frente a los diferentes embates del nacionalismo. En este sentido, afirma que “el PSOE está más por el aislamiento del PP que por enfrentarse a la ofensiva nacionalista. No cabe ser muy optimista sobre la posición del PSOE, aunque sí sobre la existencia de esa mayoría social de españoles que entiende lo que estamos haciendo y apoya la necesidad de fortalecer la nación”.
A su juicio, “en el PSOE hay dos izquierdas, y una tiene que ganar a otra para que un día pueda gobernar en España”. Sin embargo, el ex ministro de Interior afirma que “el día que haya un líder (en el PSOE) que gane a IU y a los filonacionalistas tipo Maragall, ese líder podrá ganar las elecciones al PP. Pero la condición previa es esa victoria contra la radicalidad –no se pueden ganar en las urnas desde la pancarta– y contra quienes no tienen clara la idea de España. Lo podía haber hecho Rodríguez Zapatero, pero tengo la sensación de que se le está pasando su oportunidad por falta de liderazgo y de convicciones propias”.
Si gobierna el PSOE, “ganaría el proyecto totalitario”
Para Mayor Oreja, el plan Ibarretxe es “un plan desesperado” que pretender construir “el muro de Berlín vasco”. El dirigente del PP está convencido de que el PNV aspira a que en Madrid se instale un Gobierno del PSOE, aunque los nacionalistas preferirían que fuera una mayoría minoritaria. “Ese día –según Mayor Oreja– habría triunfado el plan Ibarretxe. Entre el proyecto Maragall y el proyecto Ibarretxe se encontraría una síntesis. Un extraño cambalache, que implicaría el desestimiento constitucionalista en el País Vasco. Ganaría el proyecto totalitario. Por eso no es una broma saber decir no al plan Ibarretxe y a sucedáneos alrededor del mismo”, en referencia al proyecto alternativo que planea presentar el PSE.
Según Mayor Oreja, para quien “IU ha dejado de existir como partido”, frente a los que dicen que “España es un mito”, en el País Vasco “sabemos que no lo es”, porque “la no-España es sinónimo de falta de libertad”. Por eso, “cuando un proyecto político hace de la negación de España su razón de ser, el resultado es una catástrofe para la libertad. El sucedáneo que nos presentan como proyecto colectivo produce la exclusión de los que sentimos España”.
La carrera sucesoria, “un proyecto colectivo”
En cuanto al proceso de la sucesión de Aznar, Jaime Mayor Oreja, uno de los candidatos a sustituir al presidente del Gobierno al frente del Partido Popular, dice que se trata de “un reto colectivo”. A su juicio, “no es el éxito o el fracaso de uno o de otro. No son meras carreras personales. Al final, en marzo de 2004, tendremos el examen de los españoles. Entonces, lo importante será que haya una mayoría que dé su confianza al PP. Si se hace mal, será una enorme decepción para esa mayoría de españoles. Lo tenemos que hacer bien. Antes de cualquier proyecto personal, está ese proyecto colectivo”, afirma.
En sus declaraciones a ÉPOCA , el líder de los populares vascos dice que, “con una decisión u otra, yo estaré al servicio de la persona que salga escogida. Del partido y de mí mismo, si soy yo. Si es otro, estaré al servicio de esa persona. Además de contar con nosotros, él ha de tomar las decisiones con total libertad para liderar el equipo. No sólo es elegido para ser candidato. Él ha de tener su equipo. Para eso va a ser el nuevo líder del PP”.
A su juicio, “en el PSOE hay dos izquierdas, y una tiene que ganar a otra para que un día pueda gobernar en España”. Sin embargo, el ex ministro de Interior afirma que “el día que haya un líder (en el PSOE) que gane a IU y a los filonacionalistas tipo Maragall, ese líder podrá ganar las elecciones al PP. Pero la condición previa es esa victoria contra la radicalidad –no se pueden ganar en las urnas desde la pancarta– y contra quienes no tienen clara la idea de España. Lo podía haber hecho Rodríguez Zapatero, pero tengo la sensación de que se le está pasando su oportunidad por falta de liderazgo y de convicciones propias”.
Si gobierna el PSOE, “ganaría el proyecto totalitario”
Para Mayor Oreja, el plan Ibarretxe es “un plan desesperado” que pretender construir “el muro de Berlín vasco”. El dirigente del PP está convencido de que el PNV aspira a que en Madrid se instale un Gobierno del PSOE, aunque los nacionalistas preferirían que fuera una mayoría minoritaria. “Ese día –según Mayor Oreja– habría triunfado el plan Ibarretxe. Entre el proyecto Maragall y el proyecto Ibarretxe se encontraría una síntesis. Un extraño cambalache, que implicaría el desestimiento constitucionalista en el País Vasco. Ganaría el proyecto totalitario. Por eso no es una broma saber decir no al plan Ibarretxe y a sucedáneos alrededor del mismo”, en referencia al proyecto alternativo que planea presentar el PSE.
Según Mayor Oreja, para quien “IU ha dejado de existir como partido”, frente a los que dicen que “España es un mito”, en el País Vasco “sabemos que no lo es”, porque “la no-España es sinónimo de falta de libertad”. Por eso, “cuando un proyecto político hace de la negación de España su razón de ser, el resultado es una catástrofe para la libertad. El sucedáneo que nos presentan como proyecto colectivo produce la exclusión de los que sentimos España”.
La carrera sucesoria, “un proyecto colectivo”
En cuanto al proceso de la sucesión de Aznar, Jaime Mayor Oreja, uno de los candidatos a sustituir al presidente del Gobierno al frente del Partido Popular, dice que se trata de “un reto colectivo”. A su juicio, “no es el éxito o el fracaso de uno o de otro. No son meras carreras personales. Al final, en marzo de 2004, tendremos el examen de los españoles. Entonces, lo importante será que haya una mayoría que dé su confianza al PP. Si se hace mal, será una enorme decepción para esa mayoría de españoles. Lo tenemos que hacer bien. Antes de cualquier proyecto personal, está ese proyecto colectivo”, afirma.
En sus declaraciones a ÉPOCA , el líder de los populares vascos dice que, “con una decisión u otra, yo estaré al servicio de la persona que salga escogida. Del partido y de mí mismo, si soy yo. Si es otro, estaré al servicio de esa persona. Además de contar con nosotros, él ha de tomar las decisiones con total libertad para liderar el equipo. No sólo es elegido para ser candidato. Él ha de tener su equipo. Para eso va a ser el nuevo líder del PP”.