Colabora

Mariano Rajoy: "Ninguno de ustedes tiene derecho a apropiarse de Cataluña porque también es España"

En el turno de réplica, el presidente del PP censuró a todos los intervinientes de los partidos que apoyan el Estatuto y recordó que "hemos oído disculpas, pero no convicción en el texto que se somete a votación". Rajoy les recordó que "ninguno de ustedes tiene derecho a apropiarse de Cataluña porque ella también es España".  "Se han producido dos hechos importantes", dijo Rajoy. "El primero es que ha venido aquí el presidente del Gobierno (eran ya las 13:45 horas) y el segundo es que Alfredo Pérez Rubalcaba ha demostrado que es un perfecto profesional de decir una cosa y la contraria", apuntó.

(Libertad Digital) En su segunda intervención en el Congreso tras las de todos los grupos parlamentarios, Mariano Rajoy señaló que se habían oído "muchas disculpas, muchas justificaciones", pero no se había "visto convicción por parte de ningún interviniente", una afirmación que suscitó abucheos por una parte de los diputados. A continuación, el líder del PP señaló que se habían producido "dos hechos significativos" desde su primera intervención. La primera, que "Zapatero ha venido aquí", en alusión a su ausencia durante las primeras tres horas de debate.
 
La segunda se refería al portavoz parlamentario del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, que, según Rajoy, "ha demostrado, una vez más, que es un perfecto profesional capaz de decir una cosa y la contraria sin que se le mueva un músculo". "No me lea el estatuto valenciano", le pidió al diputado, "porque yo acepto para Cataluña el artículo 1 del texto valenciano", en el que se define, según recordó, que "el pueblo valenciano es una comunidad autónoma" dentro de España. "¿Por qué se olvida usted de esto, señor Rubalcaba?", preguntó.
 
"No he oído ni un solo argumento sobre el proceso de elaboración" del Estatuto, lamentó. "Hemos asistido a una subasta", recordó, "primero del tripartito". Enumeró la "presión a CiU", que "luego pactó con Zapatero" para "pactar después lo contrario de lo que pactaron". Recordó la "redacción ininteligible" del texto y vaticinó que "veremos cómo presionan a ERC" para lograr el sí. "Se trata de quitarse de encima", dijo, "la historia más rocambolesca en España desde 1978".
 
Rajoy destacó que en el debate sobre el estatuto no hay cabida para los relativismos que comúnmente utiliza Zapatero. "Para este Gobierno –acusó–, todo es relativo". No vale, dijo, restar importancia al tema y señalar que simplemente estamos ante "la actualización de un modelo autonómico", tal y como lo ha proclamado el presidente. Se está discutiendo, subrayó, un texto que establecerá en dónde y en quién reside la soberanía. Enseguida, dirigiéndose a la bancada socialista afirmó que nunca se podrá ser "más demócrata" por tergiversar temas centrales.
 
Citando al dirigente de Batasuna-ETA, Arnaldo Otegi, dijo que el Estatuto de Cataluña "abre el camino" para poder lanzar una reforma en profundidad de otro estatuto como el del País Vasco. Añadió que en la historia de España ningún presidente o jefe del Gobierno ha aceptado que el término "nación" sea utilizado con  tanta ambigüedad. Con la aprobación de este texto, advirtió, "nos van a dejar una bomba de relojería que puede estallar mañana o pasado mañana, pero que se quedará aquí".
 
Dirigiéndose a Zapatero– "porque en mi anterior intervención no estaba"–, le recordó que tras el alto el fuego de ETA habló con él para transmitirle el apoyo de su partido. Ahora, dijo, "mucho le agradecería de que fuera leal" para con quien "le ayudamos". Rajoy le estaba recriminando por el cambio de postura del Fiscal General del Estado, Conde Pumpido, después de que éste ya no pidiera prisión incondicional para Otegi.
 
El líder del PP se dijo convencido de que el Estatuto es malo para Cataluña porque los ciudadanos catalanes no van a ganar nada cuando se les recortan sus derechos, cuando no existe libertad en la enseñanza o cuando la unidad de mercado desaparece. Es, resumió, un "texto impresentable" comenzando por su título primero. Enfático, manifestó que "no acepta" que nadie se apropie de Cataluña y le censure por hablar y defender criterios distintos a los que defienden los grupos nacionalistas que, desde hace tiempo, son similares a los del Gobierno de Zapatero. "Yo pregunto, ahora, cuál es el coeficiente de vileza y maldad de quienes utilizan esos términos", sentenció.
 
"Ninguno de ustedes –resaltó– tiene derecho a apropiarse de Cataluña porque ella también es España." Además, destacó, "cuando no comparto el contenido del estatuto, no critico a Cataluña, sino a ustedes, al igual que cuando critico a Zapatero no es a España". Finalmente, precisó a Zapatero que "no ha habido en la historia de España un presidente del Gobierno que acepte que una parte de su país es una nación", como tampoco "hay ningún país del mundo que esté formado por varias naciones... y si lo sabe, suba a la tribuna y dígalo".

Temas

Ver los comentarios Ocultar los comentarios

Portada

Suscríbete a nuestro boletín diario