L D (EFE) El presidente del Partido Socialista de Cataluña (PSC), Pasqual Maragall, alertó en San Sebastián del "exceso de judicialización" de la política respecto al País Vasco, lo que, en su opinión, "es un reflejo del fracaso del Gobierno" en esta materia. Maragall presentó junto al alcalde de San Sebastián, Odón Elorza, el libro "La ciudad que nos une", que recoge reflexiones del alcalde socialista sobre la transformación de la capital guipuzcoana durante sus 12 años de gestión municipal y que ha sido prologado por el dirigente socialista catalán. La buena sintonía entre ambos quedó patente cuando Elroza dijo que apoyará a Maragall “diga lo que diga”, aunque fuera –ese era el caso– para creer la versión de Otamendi sobre las torturas de la Guardia Civil.
El líder del PSC, que recientemente otorgó verosimilitud (“crédito” fue el termino aceptado por Caldera) a las denuncias de malos tratos del director de Egunkaria, Marcelo Otamendi, no quiso pronunciarse sobre la reacción del ministerio del Interior, que decidió querellarse contra el periodista y otros tres detenidos que han manifestado haber sido objeto de torturas. Dice Maragall que "no es bueno que tenga que ser la judicatura la que nos diga a cada paso si los gobiernos, algunos ciudadanos, algunos partidos o algunos diarios lo hacen bien o mal".
No quiere opinar, pero lo hace
Maragall rehusó opinar, "hasta que no vea la decisión judicial", acerca de la posible ilegalización de Batasuna, sobre la que delibera actualmente el Tribunal Supremo, aunque advirtió de que la "disolución de un partido o el cierre de un periódicos son actos graves, muy importantes, que nos retrotraen a otros momentos de la historia en los que estos hechos están unidos a la inexistencia de libertades". Dice que rehúsa opinar, pero no ha podido ser más claro.
Nacionalistas vascos, catalanes y españoles
Recordó que los socialistas no gobiernan "ni en Euskadi, ni en Cataluña, ni en España", que, según dijo, están dirigidas actualmente por "nacionalistas vascos, catalanes y españoles, muy respetables todos", pero cuya gestión "no está dando el resultado que la Constitución y los estatutos permitían esperar".
Por su parte, Odón Elorza, insistió en rechazar el planteamiento del PP para concurrir a las elecciones municipales en listas conjuntas con los socialistas, ya que, más allá de coincidir "en la defensa del respeto a la vida y la libertad", estos dos partidos están separados por "profundas diferencias". El primer edil donostiarra dijo que el PP "está cayendo en vertical" y trata de "marear la perdiz" con la oferta electoral al PSE/EE, tras lo que aseveró que los socialistas "están en contra la guerra y en contra de que se actúe contra la libertad de expresión".
El acto de presentación del libro sirvió también para anunciar una nueva candidatura para la lista de Elorza en las elecciones del 25 de mayo, la de Mireia Lluch, hija de Ernest Lluch asesinado por ETA en 2000: "Lo digo hoy aquí, en el Centro Cultural Ernest Lluch. Seguramente a su padre le hubiera gustado muchísimo", dijo Elorza, quien agregó que la agrupación socialista de San Sebastián ha acogido a Mireia "unánimemente".
El líder del PSC, que recientemente otorgó verosimilitud (“crédito” fue el termino aceptado por Caldera) a las denuncias de malos tratos del director de Egunkaria, Marcelo Otamendi, no quiso pronunciarse sobre la reacción del ministerio del Interior, que decidió querellarse contra el periodista y otros tres detenidos que han manifestado haber sido objeto de torturas. Dice Maragall que "no es bueno que tenga que ser la judicatura la que nos diga a cada paso si los gobiernos, algunos ciudadanos, algunos partidos o algunos diarios lo hacen bien o mal".
No quiere opinar, pero lo hace
Maragall rehusó opinar, "hasta que no vea la decisión judicial", acerca de la posible ilegalización de Batasuna, sobre la que delibera actualmente el Tribunal Supremo, aunque advirtió de que la "disolución de un partido o el cierre de un periódicos son actos graves, muy importantes, que nos retrotraen a otros momentos de la historia en los que estos hechos están unidos a la inexistencia de libertades". Dice que rehúsa opinar, pero no ha podido ser más claro.
Nacionalistas vascos, catalanes y españoles
Recordó que los socialistas no gobiernan "ni en Euskadi, ni en Cataluña, ni en España", que, según dijo, están dirigidas actualmente por "nacionalistas vascos, catalanes y españoles, muy respetables todos", pero cuya gestión "no está dando el resultado que la Constitución y los estatutos permitían esperar".
Por su parte, Odón Elorza, insistió en rechazar el planteamiento del PP para concurrir a las elecciones municipales en listas conjuntas con los socialistas, ya que, más allá de coincidir "en la defensa del respeto a la vida y la libertad", estos dos partidos están separados por "profundas diferencias". El primer edil donostiarra dijo que el PP "está cayendo en vertical" y trata de "marear la perdiz" con la oferta electoral al PSE/EE, tras lo que aseveró que los socialistas "están en contra la guerra y en contra de que se actúe contra la libertad de expresión".
El acto de presentación del libro sirvió también para anunciar una nueva candidatura para la lista de Elorza en las elecciones del 25 de mayo, la de Mireia Lluch, hija de Ernest Lluch asesinado por ETA en 2000: "Lo digo hoy aquí, en el Centro Cultural Ernest Lluch. Seguramente a su padre le hubiera gustado muchísimo", dijo Elorza, quien agregó que la agrupación socialista de San Sebastián ha acogido a Mireia "unánimemente".